1735 palabras
El cuerpo Milagroso, es el manifestador de lo que miras con tus ojos, lo que ves y llamas “lo real”; es el manifestador del escenario en donde te encuentres, tú eres tan actor como los demás y la vibración de ese actor es la que se transmite a todo y a todos en el entorno; y los iguales se repelen y los diferentes se atraen. + y – se atraen y + y + se repelen. El cuerpo intuitivo, es el conductor. El cuerpo transcendental es la comunicación con el todo.
Y así como este flujo es en espiral, como todo en la vida fluye en espiral, el agua se va en espiral, las galaxias se van en espiral, también nosotros fluimos en espiral y el proceso de cocinar también ocurre en espiral. Todo sucede en espiral.
Este flujo energético espiral parte del núcleo: todo gira alrededor de un núcleo, desde el micro cosmos —el mundo de los átomos— hasta el macro cosmos el mundo de las galaxias. Nosotros estamos en medio y nuestro núcleo es el corazón: alrededor de éste giran los órganos; nosotros somos el núcleo y los demás son los astros de ese núcleo. Ésta es la descripción del campo de lo ASTRAL. Tiene que ver con todo lo que es MATERIA. Su núcleo se comunica con los las partículas del entorno… Partimos… del corazón que es cocinando emociones.
Y de ahí al 5-milagro, y de ahí al 3-los astros, y de ahí a 6-lo intuitivo, y de ahí a 2-lo sexual, y de ahí a 7-lo trascendental y de ahí a 1-lo físico. Finalmente estamos viviendo en lo físico, es de nuestro mejor interés enfocarnos en la mecánica del flujo de soltarse y vivir el ahora.
Partimos usando “lo físico”, un pensamiento armónico condicionado con emoción ascendente, la fuerza del bien para ti y para mí en todas partes siempre sin connotaciones negativas y el antídoto a la creencia de que algo está mal. Y esto hace que el resto del ciclo de pensamiento entre por añadidura al espiral para que la energía viaje del corazón hasta lo físico y le traiga a lo físico armonía. Cuando uno medita en esto —no de manera intelectual, sino mecánicamente— por medio de introducir al río de pensamientos este pensamiento armónico, es cuando nos quitamos del camino y la conciencia se reconoce a si misma.
Nos empezamos a percatar que los acontecimientos que nos ocurren los estamos deseando nosotros mismos. Por hábito a la comodidad, seguimos una creencia que aporta seguridad, dentro de un patrón de creencia basado en experiencias del pasado. Por ejemplo: si empezamos a pensar sobre un tema, y éste nos apabulla y nos deprime, o está sujeto a emociones descendentes, lo empezamos a manifestar en la vida, y, por ende, se convierte en una profecía que se autosatisface. Hasta que el individuo se da cuenta de que está inmerso en sus pensares y vuelve a pensar el pensamiento armónico —que es simplemente alabanza— y toda la estructura del mundo moderno se empieza a tambalear. De esta manera podemos empezar a ver, desde una plataforma de alabanza, que es simple apreciación. Ésta es una emoción quizás tan poderosa como el amor mismo. No hay que hacer un ambiente de alabanza, ni hay que creer en alabanza, solo hay que pensar alabanza, para que la mente empiece a transformarse y a manifestar alabanza en la vida del viviente. Así es como se comunica energía a la comida que cocinamos. Cuando nos podemos quitar de en medio del camino y dejar que la Luz Infinita Interior, ejecute el primer impulso en apreciación y complete su comunicación con el viviente por medio del espiral, esto es, el observador, lo observado y el proceso de observar.
El Observador se quita de en medio cuando piensa alabanza. Qué curioso que en hebreo la palabra alelu significa alabanza y ya significa el creador, el elohim (deidad). ¿Y quién es el creador? Pues ése es el obervador de todo lo que existe y ocurre para él o ella, viviendo una experiencia en relación con lo observado en el proceso de observar.
Los 3 mundos inferiores al núcelo… los mundos relativos y finitos es en donde nosotros existimos: durmiendo, soñando o despierto. Y los tres mundos superiores al núcleo… los mundos absolutos, infinitos y en donde nosotros no existimos: sólo es el uno, perpetuo, exaltado y unificado.
En cuanto partimos del núcleo del amor, hacia el espiral por el impulso de la decisión de pensar alabanza, ¡Más fácil no se puede! Todo lo demás llega por añadidura: sólo necesitamos quitarnos del camino y dejar que la vida se manifieste en inocencia, del momento presente, en el ahora.
Así se cocina. Comunicación sutil con los ingredientes: hay campos de técnicas de cocina que puedes aprender en alguna Universidad de la cocina. Yo te puedo mostrar el hilo negro que sostiene todo en la creación. En sánscrito ese hilo se llama el sutra atman, o sea, el hilo de almas. Todos estamos interconectados en una telaraña y somos responsables por nuestra realidad de acuerdo a los pensamientos que tenemos y deseamos contemplar…
Sólo podemos hacer el primer impulso… alabanza.
¿Qué le pasa a la energía cuando va a la inversa, o sea, de manera descendente? Del 4-corazón a 3-astral, a 5-milagroso, a 2-sexual, a 6-intuitivo, a 1-físico, y se evita el 7... y si no le entiendes, ¡léelo de nuevo todo en inocencia!
En este caso, la energía se exponencia en el caos de lo astral por el poder del 5, de manifestar la realidad caótica. Esto llega al 2-sexual, y en el caos se busca la unión a toda costa: que la energía se discipa y no podemos escuchar la intuición por el ruido mental y entonces lo físico se vive en estrés.
Todo depende de qué quieres… y ¿qué estamos dispuestos a hacer para transformarnos?