1407 palabras
Dos estrellas
El director Richard Kelly sorprendió a la crítica en 2001 con “Donnie Darko”, la historia de un adolescente desequilibrado y sus alucinaciones con un conejo que le ordenaba matar. “La caja” es su película más reciente y no le ha dado las mismas satisfacciones. Después de haberla visto he podido entender a sus detractores.
Nos encontramos en un barrio norteamericano en 1976. Una misteriosa caja aparece en la puerta de una casa. Allí vive la familia Lewis, integrada por Norma (Cameron Díaz) Arthur (James Marsden) y su pequeño hijo Walter. La caja está hecha de madera y tiene un domo de cristal dentro del cual puede verse un botón rojo, el domo está cerrado con llave. Horas más tarde, un misterioso señor, Arlington Steward, toca a la puerta de los Lewis. Norma le recibe, el Sr. Steward le entrega la llave del domo y le hace una increíble oferta: si presiona el botón, una persona, a quien ella no conoce, morirá y a cambio ella recibirá un millón de dólares. Esta es la premisa inicial de “La caja”.
El filme está basado en un cuento corto titulado “Botón, Botón” de Richard Matheson, un reconocido escritor especialista en la ciencia ficción y a quien también se le debe la novela en la cual se basa “Soy leyenda”, protagonizada por Will Smith. El cuentito original de Matheson es extraordinario y si usted quiere leerlo completo vaya a esta dirección de internet: http://www.ucm.es/info/especulo/numero41/botonmat.html El relato es muy corto y no le quitará mucho tiempo. Si no lo quiere leer por temor a que le cuente el final de la película, no se preocupe, realmente no tiene nada que ver con ella. Lo que hizo Richard Kelly fue tomar únicamente la premisa del cuento y a partir de allí desarrollar una historia totalmente diferente.
Notará que como narración corta funciona muy bien y remata con un final inesperado y sorprendente. Desafortunadamente “La caja” no se desarrolla con la misma eficacia del cuento. El problema es muy simple: el director forzó un relato breve para convertirlo en un largometraje. El resultado es que la fuerza del escrito original se diluye en una trama que navega sin timón entre el thriller onírico a la David Lynch y la conspiración extraterrestre a la Steven Spilbergh. Si a eso le agregamos su poca claridad narrativa, entenderemos por qué los espectadores terminan con cara de ¿What? ante una historia que lo quiere todo pero no explica nada.
Es una pena la manera en que tiraron a la basura una premisa tan buena. En guionismo existe un término llamado high concept que se expresa cuando la idea base de un guión es asombrosa. Por ejemplo, la premisa de “Matrix”: un hombre descubre que la realidad no existe, es solo una ilusión, ya que los humanos viven incubados dentro de una gran máquina llamada Matrix, que los absorbe mientras mantiene sus mentes dormidas y en un sueño de falsa realidad. Eso es un high concept.
“La caja” tiene una gran idea como punto de partida pero se derrumba a lo largo de su desarrollo. De haberse ceñido al texto pudo ser un formidable cortometraje, pero el empeño de Kelly por alargarlo le hizo perder la brújula. El guión está muy poco trabajado, desde los personajes hasta la imprecisión del tono, pues la mezcla de ciencia-ficción y thriller no logra unidad narrativa. Por una parte hay un tratamiento de misterio surrealista que le queda muy bien a la atmósfera del filme, la sensación inicial de que hay un enigma que sobrepasa lo real me pudo encantar. Pero de pronto, la parte sci-fi entra para darle una explicación científica-ufológica y todo se va al diablo. Si hubiese permanecido como un suspenso onírico tipo Mulholland Drive hubiese terminado quitándome el sombrero ante ella. Pero ese juego absurdo de “te lo explico y luego no” la convierte en un fiasco. ¿Qué pretendía el director con este experimento?
Me encanta cómo trabaja Cameron Díaz, pero aquí siento que el papel no le queda, no me creo ni tantito que sea la madre de un niño de más de 10 años. Por su parte, James Marsden –el ex cíclope de los X-men- tampoco convence como esposo y padre, menos encima de un auto deportivo de super lujo cuando se supone está preocupado por el pago de la colegiatura de su retoño. No es que dude que haya padres irresponsables, simplemente el personaje no es así. Por acentuar el carácter juvenil de los protagonistas, Kelly descuida aspectos más importantes de la historia.
Quien se luce a nivel actoral es Frank Langella, aunque la cicatriz que le pusieron es innecesaria y estorbosa para su interpretación. Entiendo que sirve para que el personaje de Cameron empatize con él. Pero ni el rostro quemado de Arlington, ni el problema en el pie de Norma fructifican en algo relevante.
Al igual que el cuento en que se basa, “La caja” retoma el misógino mito de Adán y Eva, donde la mujer es la causante de todas las desgracias del hombre. Ese punto es bastante cuestionable. Lo que sí es atinado es el tema del egoísmo entre los seres humanos, que son capaces de posponer la vida de otros al afán de tener dinero. Eso y el aspecto de la culpa debieron ser los temas centrales y no la ciencia ficción. El misterio de la cajita y el Sr. Arlington pudieron permanecer ocultos, de esa forma Richard Kelly nos hubiera dejado pensando y se evitaba caer en un mar de ideas que no llevan a nada.
Lo mejor: Frank Langella, el diseño escenográfico —particularmente la setentera casa de los Lewis— el tema del egoísmo y esos momentos de misterio sin sentido que parecen de David Lynch.
Lo peor: Haber adaptado el cuento original a un largometraje, los intentos explicativos de extraterrestres, hay varias escenas confusas e inconexas —sobretodo la de los portales de agua—, muchas ideas que se quedan a medio camino.
RECOMENDACIONES
“Amor sin escalas”
Jason Reitman, es uno de los mejores directores y guionistas en Hollywood. De origen canadiense, Reitman se ha consolidad como un cineasta muy talentoso. Tal vez lo recuerde por “Juno”. Pues ahora se estrena su más reciente producción “Amor sin escalas” protagonizada por George Clooney y Vera Farmiga.
“Invictus”
El maestro Clint Eastwood también está de estreno con “Invictus”. Llevando como intérpretes a dos actores de grandes ligas: Morgan Freeman y Matt Damon.
“Regresa”
Otro actor de grandes ligas: Jaime Camil. Jajaja. Pues que pena pero también se estrena “Regresa”, coproducción México-España, protagonizada por el señor Camil que, en su empeño por ser actor, sigue metiendo en vergüenzas al escaso cine nacional. No hay semana perfecta.