1. Santo Tribunal. Al director de la Facultad de Derecho de la UADY José Luis Vargas Aguilar siempre le han gustado los juicios. Cuando era profesor de historia del Colegio Peninsular (Roger's Hall) organizaba entre los alumnos unos muy didácticos "juicios" de la historia a personajes de la vida política del pasado. Los alumnos asumían funciones de los personajes, de la fiscalía, de la defensa y del jurado. Ahora a Vargas Aguilar  —hermano mayor de la síndico municipal de Angélica Araujo en el Ayuntamiento de Mérida— le da por "enjuiciar" a sus alumnos: la antididáctica universitaria. Quien piense libre, sufrirá represalias. Quien se niegue a aceptar la línea (y la línea es que el hijito del presidente de la Cámara de Diputados Jorge Carlos Ramírez Marín sea el presidente de la sociedad de alumnos) que se atenga a las consecuencias. No cabe duda, Vargas Aguilar es merecedor del premio "Guillotina de Oro" otorgado a los profesores universitarios que piensan que la universalidad de la universidad consiste en ver el universo tal como lo ve el director de la Facultad.

2. Sálvese quien pueda. Ha trascendido que el famoso artículo de "autocrítica" de Salvador Vitelli se escribió en un ambiente de berrinche. Algunos comentan que lo único que no hay en el escrito de Vitelli Macías es autocrítica. Él no asume  responsabilidad alguna, sólo autoalabanzas. "¿Quién dijo que esto es una autocrítica?", refunfuñan muchos panuchos ofendidos. Se supo que ese editorial lo mandó publicar Vitelli justo después que el gobierno federal nombró en la API (Administración Portuaria Integral de Progreso) a otra persona para el puesto. Desde hacía tiempo Vitelli aspiraba a la titularidad de la Administración Portuaria de Progreso. Se supo que el PAN de Yucatán lo postuló ante el gobierno federal para ese cargo como uno de los compromisos adquiridos con el Salvatore de Acción Nacional. Sin embargo, la Federación, medrosa de las reacciones de la gobernadora Ivonne Ortega cuando se ha nombrado a un panista para ese puesto (¿remember Alberto Reyes?), nombró a un delegado "neutral", no panista. De poco sirvieron los reclamos de los azules ante el gobierno federal. Y Salvador Vitelli reaccionó con el hígado, pegándole a su partido en la prensa, y favoreciendo la también berrinchuda pataleta con ecos a su artículo, entrando al juego ex panistas como Ana Rosa y Luis Correa. Por lo visto Correa Mena tenía razón: Vitelli si había pedido algo más. El gobierno de Calderón no le cumplió al PAN y Salvador se vengó en la figura de Acción Nacional. ¡Vaya salvador!

3. Los chicharrones de Nachito. Los problemas en el Ayuntamiento de la "Nueva Mayoría" empiezan a aflorar como la hierba en parques y jardines —hay baches hasta ¡en el Paseo de Montejo!— de nuestra blanca Mérida. Y es que ya circulan los rumores de que pasadito el año se producirán los primeros cambios en el Ayuntamiento de Angélica. Se dice que el protegido de Pedro Espadas, el Ing. Jorge Ermilo Barrera Jure está totalmente nulificado por el "inge" Ignacio Mendicuti Priego, actual subdirector de Servicios Básicos. Nachito —de quien  se dice que ni título de ingeniero tiene— es el que realmente maneja y toma las decisiones en la Dirección de Servicios Públicos Municipales, mientras Barrera Jure llega a encerrarse a su oficina y ni quien sepa de él. Eso sí, el junior de juniors Nachito no firma una sola factura de pago, ni mucho menos algún contrato, para no arriesgar un centímetro cuadrado de su dinástico pellejo.

4. El pato. Que "el que carga con el pato" de las firmas y la responsabilidad legal de sus superiores es uno de los subdirectores: Miguel Enríquez López. Se dice que es desproporcionadamente baja la cantidad de dinero que gana de sueldo para las friegas que se lleva. Otros cobran y él carga con la responsabilidad.  Acostumbrado a una vida cómoda y a manejar su tiempo, tiene que entrar a las 8:00 a.m. y no tener horario de salida, mientras los de arriba se rascan la panza. Enríquez no necesita el trabajo ya que cuenta con negocios particulares que le dan en un día lo que gana en diez días como funcionario. Además de que es otro que está sujeto a las decisiones de Nachito. El conflicto entre los comodines y los que hacen la chamba estaría a punto de estallar. ¿Y quién dijo que la política es justa? El otro conflicto que está a punto de reventar en la Comuna es el de las chispeantes tensiones entre rolandistas versus angeliquistas. Se pone bueno.

5. La labia de Sarabia. De todos los rumbos llegan reportes de que los parques y jardines de nuestra querida Mérida están hechos un desastre. No hay "parqueros" que atiendan y conserven los parques como estábamos acostumbrados. Las empresas particulares que prestan servicios para dicha labor no han podido cobrar un solo pesito desde que comenzó esta administración. En consecuencia, ya no hay "parquero" para cada parque y los pocos que conservan su trabajo se quejan de que no se les paga. ¿Qué pasó con el Carlos Sarabia que en la administración anterior defendía al gremio? ¿No hasta reclamaba a César Bojórquez que el Ayuntamiento es "patrón solidario" y por tanto tienen que garantizar que los asalariados particulares de aquellas empresas cobren en tiempo y forma? El ex regidor de "Todos Somos Yucatán" es ahora subdirector de Cultura del Ayuntamiento. Así como Ivonne premió a Ana Rosa en el INAIP, Angélica le cumplió a Carlos Sarabia Barrera. ¡Buen provecho!

7. Retranca. Los regidores panistas del Ayuntamiento de Mérida se han anotado un triunfo al conseguir que Angélica Araujo echara marcha atrás la pretensión de votar "en paquete" los usos del suelo de cantinas y bares junto con los de supermercados. Los panistas, comandados por Luis Canto García, tuvieron que pagar un desplegado para dar a conocer sus argumentos, que no fueron reproducidos por la prensa. El argumento central de Canto y sus colegas fue que no es lo mismo aprobar un permiso para la venta de alcohol en un supermercado Chedraui, que en cincuenta y tantos giros, algunos aprobables y otros no. La alcaldesa tuvo que doblar su brazo y aceptar en la siguiente sesión que se revisara el asunto "caso por caso". Ya hasta había acusado a los de la oposición de "oponerse a la creación de empleos en Mérida".