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Lo dijimos desde el día 1 y lo repetimos hoy; de hecho, no lo dejaremos de decir cada vez que la confusión surja en cualquier mente.
La idea motor de nuestro semanario Artículo 7 se define a partir de la búsqueda de información clara. Nuestra orientación es democrática. Buscamos que nuestra sociedad sea producto de la participación generalizada del ciudadano.
Para que el ciudadano pueda participar, necesita información fidedigna y apegada a la realidad, sustentable con hechos, estadísticas, mediciones y datos que todos puedan corroborar usando el único método que consideramos válido para medir cualquier cosa: el científico.
Aquí sólo aceptamos el donativo que viene sin cadenas, libre, plenamente confiado en nuestras decisiones editoriales dentro de las cuales constantemente les suplicamos no entrometerse.
Somos de orientación transparentista. Nos apasiona la transparencia, las cuentas claras, la verdad pura y simple. Nos apasiona que el gobierno no esconda dato alguno; deseamos ver políticos sin miedo a vivir con un micrófono que esté lanzando al aire todo lo que negocian con quienes sea que traten cada día.
Estamos hartos de una sociedad que no confía sencillamente porque no sabe cuándo debe hacerlo. Los medios embutidos, los medios que lanzan notas sólo para darles gusto a los orígenes de su embute han logrado la confusión total. Nadie cree en algo que venga del gobierno, no importa qué color tenga.
El objetivo del sistema que moría en el 2000 era hacer que pareciera que todos eran iguales. Jamás hubo gobierno más auditado que el de Vicente Fox. Pero no hay forma más efectiva de destruir una realidad, que mintiendo sistemáticamente acerca de ella todos los días. Hasta hoy siguen hablando de "cuentas millonarias dudosas". El ciudadano que no tiene el privilegio —que no debería ser tal, sino sencillamente, lo común de todos los días— de entender los orígenes del contenido de las notas, duda hoy de todo. Ha perdido cualquier confianza que haya tenido alguna vez en su país. Ha perdido cualquier esperanza de que su país pueda algún día ser transparente y honesto.
¿A eso le llaman "orientación panista"? El término "panismo" se habría de referir a todo lo que tiene que ver con lo que sucede dentro de las estructuras del partido política mexicano llamado "Acción Nacional". Los que nos llaman "de orientación panista" están confundiendo el deseo de transparencia, cuentas claras, respeto a la democracia y a los derechos humanos con el panismo.
Los que nos llaman "de orientación panista", están confundiendo a panistas que se apasionan —como nosotros— por las cuentas claras, la transparencia, la democracia, el progreso social sustentado en una economía sana y la rendición constante de cuentas con políticos como "cualquier otro" que aquí nosotros apoyamos sólo por concordancia de objetivos.
Aquí en Artículo 7 no hay amistad ni parentezco ni partidismo que valgan cuando se violan los principios que defendemos: legalidad, transparencia, democracia, productividad, derechos humanos y racionalidad en el gasto público. No nos gusta el populismo porque consideramos que es uno de los más efectivos aportadores de pobreza y desinformación.
Si hoy gente del PRI actúa de acuerdo con los principios que aquí hemos enunciado, ¿también nos dirían de "orientación priista"?