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Mérida, Yucatán, 2 de octubre de 2013.- El desastre para muchas familias y comunidades del país no comenzó por las inundaciones y lluvias provocadas por el paso de Ingrid y Manuel, inició muchos años a tras cuando autoridades locales, constructores y desarrolladores de vivienda, permitieron y promovieron la ocupación de zonas de alto riesgo.
Enrique Soto Alva, Presidente de la Asociación Nacional de Instituciones de la Enseñanza de la Planeación Territorial el Urbanismo y el Diseño Urbano, señaló lo anterior en el XVI Congreso Nacional de este organismo, que se realiza del 2 al 4 de octubre en la Universidad Autónoma de Yucatán.
Indicó que hoy día, en las Instituciones de Educación Superior se forman especialistas sobre estos temas que pueden participar en los procesos de diseño urbano territorial, asimismo exhortó a aprovechar las lamentables experiencias ocurridas para no cometer los mismo errores.
En representación de Alfredo Dájer Abimerhi, rector de Universidad Autónoma de Yucatán, José de Jesús Williams, Director General de Desarrollo Académico, dio la bienvenida a todos los participantes, durante su intervención señaló que existen factores sociales y económicos que inciden en la ecología urbana, de ahí la pertinencia de considerar aspectos ambientales en su diseño y de esta forma mitigar efectos negativos.
También aseguró que “es preciso racionalizar el uso del suelo, que los asentamientos humanos consideren criterios integrales de correspondencia con factores ambientales, como el impacto de los fenómenos naturales, que sean seguros, salubres y agradables para los habitantes”.
El directivo afirmó que las investigaciones que realizan las instituciones involucradas en la enseñanza de la planeación territorial, el urbanismo y el diseño urbano, aportan conocimientos, elementos de análisis y estrategias de solución para enfrentar el reto que impone el desarrollo de las regiones y el país para lograr ciudades sustentables en los ámbitos social, ecológico, económico y cultural.
Ginés Laucirica Guanche, director de la Facultad de Arquitectura, expresó que “en el siglo XXI las ciudades son el punto neurálgico del desarrollo de las actividades humanas, lo que representa un desequilibrio con el medio rural, el reto consiste en preservar la vida silvestre, así como en áreas externas y en las ciudades, es bueno que haya densificación, pero debe incluir a la naturaleza, no puede dejarla fuera y convertirlo todo en grandes planchas de asfalto y concreto”.
La inauguración estuvo a cargo de Eduardo Batllori Sampedro, Secretario de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente. En su intervención invitó a reflexionar acerca de la planeación urbana y su afectación a la naturaleza y cómo esta, con el paso del tiempo, recupera sus espacios perturbando los servicios ambientales, creando un desequilibrio y disminuyendo las capacidades de nuestro ecosistema.
En el evento también estuvieron presentes José Sauri Molina, Director de Desarrollo Urbano del Ayuntamiento de Mérida; Wilberh Novelo Ceballos, Delegado de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano; Sergio Flores Peña, presidente de la Asociación Latinoamericana de Escuelas de Urbanismo y Planeación; entre otros.