MEXICO, D.F., 20 de noviembre.- El desorden que imperó en el salón de sesiones de la Cámara de Diputados, entre representantes del PRD, PT y Movimiento Ciudadano que enfrentados a gritos reclamaban a los priístas por la impunidad que permea en las entrañas del país, y éstos les devolvían el reclamo con gritos de "Asesinos, asesinos" -por la probable relación con el ex alcalde Iguala-, propició que el presidente de la Mesa Directiva, Tomás Torres Mercado, levantara la sesión, sin que se hubiese debatido el tema de la Casa Blanca en las Lomas.

La Junta de Coordinación Política había acordado la víspera, que se incluyera en la agenda política de la sesión de este jueves el debate sobre la propiedad de la casa de la pareja presidencial en las Lomas de Chapultepec, y la probable vinculación de dirigentes perredistas con el ex alcalde de Iguala, José Luis Abarca.

El primer rechazo a abordar el tema en tribuna ocurrió cuando la diputada de Movimiento Ciudadano, Luisa María Alcalde, ocupó su tiempo para abordar el tema de la casa de las Lomas de Chapultepec. La legisladora se inscribió en el debate sobre una reforma a la Ley General de Educación. No obstante su alocución se centró en la propiedad de la esposa del Presidente Enrique Peña Nieto. Desde entonces los priístas demandaron que terminara su intervención a gritos y la diputada alcalde les respondió señalando que ese partido es guardián de la impunidad.

Más tarde, minutos antes de iniciar la agenda política, un grupo de diputados entre los que se encontraban Manuel Huerta, Gerardo Villanueva, Loretta Ortiz y María del Socorro Ceseñas desplegó una manta con el mensaje: “EPN, ¡¡¡Renuncia ya!!! Ayotzinapa vive".

Mientras permanecían acostados al pie de la tribuna mostrando el contenido de la manta, subió para participar en la sesión el diputado priísta Miguel Ángel Aguayo, ex rector de la Universidad de Colima, quien se distingue por no presentar iniciativas ni subir a tribuna para emitir cualquier tipo de alocución.

Desde ahí, el diputado Aguayo se negó una y otra vez a iniciar la lectura de su intervención, a menos que se retirara la manta, “con al que no estoy de acuerdo”. El presidente de la Cámara Tomás Torres Mercado intentó disuadir a ambas partes de ceder a esas posturas, porque en la agenda política se contemplaba el debate de la casa presidencial y el caso Ayotzinapa.

Tal acción desquició a la bancada del PRI y del Partido Verde encabezados por Isidro Moreno y Abel Saldo, del PRI, y por el verde Arturo Escobar y Vega, quienes furibundos y enrojecidos reprochaban a los integrantes de la posición con dureza: “¡Asesinos, asesinos, asesinos!”, en referencia a la probable vinculación de dirigentes de la Izquierda con la delincuencia organizada en Guerrero.

Los perredistas, petistas y de MC también respondieron con enojo y dureza: “¡Amarren a sus perros. Hipócritas y corruptos!”.

En ese momento se comenzó a tensar el intercambio de insultos. Laura Barrera, diputada priísta por el Estado de México, gritaba a las diputadas de oposición, entre ellas Socorrro Ceseñas, “Ya bájense chachas, sirvientas. Las diputadas del PRD son una chachas”, insistió. En respuesta, las perredistas le respondieron “ese calificativo no nos ofende pero ustedes son igual que las faranduleras a las que defienden”, y la respuesta de la diputada mexiquense fue fulminante “¡Son unas pendejas!”, y la replica de Ceseñas también giro en el mismo tono, “No la pendeja eres tú, tú eres la pendeja”.

Ya con ese cruce de señalamientos de por medio, y previendo una acción violenta, porque tanto priístas y perredistas se encontraban enconados, Tomás Torres decidió levantar la sesión y trasladar los temas agendados para este jueves a la del martes próximo.

En es momento, el coordinador del PRI, Manlio Fabio Beltrones, se dirigió a la zona donde se ubica el PRD para exponerle al coordinador de este partido, Miguel Alonso Raya, que había un acuerdo: “Vamos ordenar del debate político, y el debate político en un parlamento se hace con agenda política, nos se hace con este tipo de acciones que son impropias de la política. La política se ejerce y se ordena, si no es una antipolítica la que permanece... No se puede justificar lo que acabamos de ver. Respetemos el derecho de todos, porque con eso conseguimos en derecho de cada quien, no hagamos cosas de las que nos tengamos que arrepentir después”.

Del lado del partido del Sol Azteca, Miguel Alonso Raya expuso que el procedimiento se tiene que restablecer, con orden y con apertura de todos los temas, para darle viabilidad a la discusión. Su compañero Roberto López Suárez le dijo a Beltrones: “Ustedes deben de estar conscientes de que en un parlamento no se pueden esconder temas y mucho menos vetar algunos de ellos. Está bien, entremos a todos los temas no tenemos ningún temor pero ustedes también acepten aquellos en los que se ven más comprometidos”.

También Malú Mícher acusó al lado priísta de vetar a Luisa María Alcalde: “No se pueden aceptar vetos en un parlamento que se abran lo debates sobre cualquier tema, y no nos amenacen con que ustedes son la mayoría el debate no es cuestión de números”.

Así, una vez que Tomás Torres dio por finalizada la sesión, las bancadas involucradas en el enfrentamiento verbal expusieron sus posiciones y la defensa de sus argumentos. La única certeza fue que en el día de la manifestación programada más importante desde los hechos de Ayotzinapa, la Cámara de Diputados no se dio oportunidad de debatir temas como la desaparición de los 43 alumnos de la normal rural y otros aledaños como el de la presumible vinculación del perredismo con el ex alcalde de Iguala, y el origen de la Casa Blanca de Las Lomas. (La Jornada)