México (28 de abril).- La frontera enfrenta un contrabando “hormiga” de alimentos “chatarra” que ha derrumbado las ventas al menudeo en alrededor de 20 por ciento.

Botanas, dulces, pastelillos, refrescos y todo tipo de golosinas se introducen desde Estados Unidos a México, sin violar las leyes de comercio exterior, pero sí las fiscales y otras de tipo local al comercializarlos sin pagar los gravámenes aplicables en la región.

La reforma fiscal homologó el IVA al 16 por ciento en la franja fronteriza del norte del país, y aplicó el impuesto de 8 por ciento para alimentos con alto contenido calórico.

La medida está generando una crisis en el comercio de la frontera mexicana.

Según Juan Manuel Hernández, presidente del Consejo Coordinador Empresarial de Tijuana, la caída del comercio en la frontera norte es de alrededor de 20 por ciento.

Las personas con visa, alrededor del 40 por ciento en la frontera, cruza de compras al lado estadounidense y utilizando su derecho de franquicia regresa cargada de este tipo de alimentos para revenderlos.

“Además, el comercio organizado de Estados Unidos se puso ‘las pilas’ y está ofertando en barata; es un efecto a nivel ‘cajuelazo’, la gente pasa, compra, y luego regresa a revender”, explicó Hernández.

Según un estudio de El Colegio de la Frontera Norte, que el CCE de Tijuana le presentó a la Secretaría de Hacienda a finales de 2013, las pérdidas para el sector comercio ascenderían a 2 mil 389 millones de pesos, y la cancelación de 39 mil plazas laborales.

“El consumo de los mexicanos en las ciudades fronterizas de Estados Unidos con México está ocasionando una fuga de divisas”, criticó Enrique Solana Senties, presidente de la Confederación Nacional de Cámaras de Comercio (Concanaco).

Alejandro Ramírez, presidente de la Cámara de Comercio (Canaco) de Ciudad Juárez, explicó que este contrabando no puede denunciarse ante las autoridades aduaneras, pues quienes lo realizan no rebasan el monto de la franquicia permitida: 150 dólares por persona, o 500 por familia.

“Al momento de cruzar no incurren en ningún delito…, lo hacen para comercializarlo luego en México”, destacó.

“Hay áreas de ambulantaje que no se veían antes en el centro; en el puente se pueden ver señoras cruzando diario, hasta dos o tres veces, el puente internacional, para comprar sus productos a precios más bajos que aquí”, explicó.

Bruno Limón, presidente del sector Botanero de la Canacintra, coincidió en que a partir de que entró en vigor la reforma fiscal, las ventas de este gremio cayeron, aunque hasta ahora no han logrado cuantificar el daño.

Cuauhtémoc Rivera, líder de la Asociación Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC), dijo que es notable el crecimiento de productos que vienen de Estados Unidos bajo este mecanismo.

Incluso, dijo, tiendas como Target o Walmart ofrecen ofertas y promociones como “dos por uno”, para atraer al consumidor.

En Reynosa, Tamaulipas, es notorio cómo sus residentes aprovechan la cercanía con tiendas y centros de comercio en Texas, para regresar cargados de mercancías que ahora resultan más caras comprar en la frontera. Además, les devuelven el IVA, si lo reclaman.

Julián de la Fuente, residente de la colonia López Portillo, dijo que él siempre acude a la Pulga de Hidalgo, Texas, a comprar.

“Ahora me traigo algo de pan, de cocas, papitas, cosas que ya están muy caras en las tiendas”.

En Matamoros, Tamaulipas, la situación es igual.

El presidente de Concanaco, Solana Senties, informó que el organismo se ha reunido con legisladores y con el propio Secretario de Hacienda, Luis Videgaray, para buscar una solución a esta crisis provocada por la reforma fiscal.- (Agencias)