México (9 de diciembre).- Luego de que confirmara que restos encontrados en el basurero de Cocula, Guerrero, pertenecían a Alexander Mora Venancio, uno de los 43 normalistas desaparecidos, su padre, Ezequiel Mora, expresó que lo que sigue es la lucha porque no desean que esto quede impune “tenemos que dar hasta lo último, porque queremos la justicia para que se haga a estos jóvenes desaparecidos y balaceados”.

Dijo, vía telefónica para el espacio de “Contraportada”, que esto no se vale porque el gobierno federal ha tratado de decir que estos jóvenes eran delincuentes y eso es mentira.

“Nuestros hijos son gente del campo; hijos de nosotros campesinos, eran puro hijos de campesinos y la verdad estoy triste porque mi hijo perdió la vida; pero corajudo por no decir, endemoniado por la muerte de él y de los malos que hicieron este daño a mi hijo. Pinche policía de Iguala y pinche presidente municipal y su esposa, Luis Abarca y la mujer de él”.

Afirmó que desean justica ya que el ex presidente municipal y su esposa están arraigados y no presos. Señaló que el presidente Enrique Peña Nieto no ha hecho nada por las muertes registradas en Guerrero.

Aseveró que seguirá en la lucha y reclamará las muertes de estos jóvenes; mencionó que en estos momento estudiar es un delito, ya no es para prepararse.

Precisó que el único delito de los estudiantes fue protestar y al ser cuestionado por Loret de Mola sobre si la suerte de su hijo la comparten los otros 42 estudiantes, respondió que sí. Comentó que fueron los peritos argentinos quienes le confirmaron que era su hijo.

Añadió que la justicia es sólo para los que tienen dinero como los narcotraficantes, quienes son protegidos por el gobierno debido a que ellos sí cuentan con los recursos; mientras que campesinos y estudiantes no lo son por ser pobres.

Expresó que “queremos justicia con esos cabrones que están en la cárcel, malditos policías de Iguala y el ese pinche presidente de Igual ah y la mujer, y el gobernador Ángel Aguirre Rivero, esta despojado de su cargo, pero no está preso y eso no es nada”.

Refirió que por el momento él no sabe que pensar todavía, él tenía el presentimiento de que su hijo estaría vivo. “me han destrozado un rama”.

Detalló que Alexander era un joven blanco que le gustaba el deporte (fútbol, siendo su equipo favorito las Chivas de Guadalajara).- (Agencias)