CIUDAD DE MÉXICO, 23 de noviembre.- Los carteles mexicanos tienen presencia en todos los continentes. Pusieron en marcha proyectos de expansión que les permitieron internacionalizar su industria criminal; en los últimos años consolidaron operaciones en lugares remotos como Sierra Leona, Japón, Rusia o Australia.

Informes de la Procuraduría General de la República (PGR) revelan que cuatro de los ocho carteles mexicanos que operan en el país han logrado establecer alianzas con organizaciones criminales locales de países en Europa, África, Asia y Oceanía, además de su presencia ya documentada en decenas de países del hemisferio americano.

En busca de nuevos mercados, y amparados en el poder que han obtenido por sus operaciones en América, estas organizaciones han ampliado sus actividades delictivas, convirtiéndose en grupos del crimen organizado trasnacional.

De acuerdo con la información de inteligencia que intercambian las autoridades de seguridad y procuración de justicia mexicanas, con sus contrapartes el mundo, se ha documentado la expansión de los carteles nacionales.

Se revela que el Cartel del Pacífico o de Sinaloa, que lidera Joaquín "El Chapo" Guzmán, también tiene la hegemonía en cuanto a su internacionalización. Tiene presencia en seis países de la Unión Europea, cinco naciones asiáticas y en Oceanía.

Aunque los reportes no indican el nivel de penetración de esta organización en el extranjero, si sus operaciones son incipientes o han ganado un terreno importante en las actividades de narcotráfico en alianza con grupos delictivos locales, se reconoce que operan células de "El Chapo" en España, Alemania, Holanda, Italia y Francia, además que "existen indicios sobre la posible presencia de la organización en Reino Unido".

El Cartel de "El Chapo" logró, por ejemplo, "establecer presuntos vínculos con agrupaciones delincuenciales italianas, principalmente la Cosa Nostra y la Ndrángueta, para actividades relacionadas con el tráfico de drogas".

Las autoridades mexicanas tienen información de la participación del Cartel del Pacífico en operaciones de narcotráfico en Malasia, Indonesia, India, China y, por primera vez, en Japón. Se destaca que este grupo criminal se ha asociado con la mafia India, "de la cual obtienen efedrina y pseudoefedfrina", precursores químicos que se utilizan en la elaboración de drogas sintéticas, como las metanfetaminas.

En China, destaca que "hay indicios de posibles vínculos entre organizaciones delictivas mexicanas, en particular los cárteles del Pacífico y "La Familia Michoacana", revelan los informes.

Las tríadas chinas "más importantes, poderosas, activas y sofisticadas" con las que los grupos del crimen organizado mexicano han entablado nexos son: Sun Yee On (Nueva Virtud y Paz); Sap Sze Wui o 14K, también conocida como Wo Chi Tau (La Federación de la Armonía o el Cartel Wo), así como Tai Huen Tsai (El Gran Círculo).

De hecho, La Familia Michoacana, más allá de algunos países americanos, sólo tiene presencia en China. Mientras que la organización de los Beltrán Leyva ha logrado establecer actividades criminales transcontinentales en España.

Los Zetas son, después de la organización de "El Chapo", los que han logrado una mayor expansión en otros continentes. Se ha documentado su presencia en Italia y Rusia; mientras que en África opera en Sierra Leona.

Al igual que el Cartel del Pacífico, se ha asociado con las mafias italianas como la Cosa Nostra y la Ndrángueta, pero además es la única organización que tiene nexos con la mafia rusa.

Mar, espacio para tráfico de droga

A simple vista se erige como un pueblo pesquero. Pescado, langostas, "los más frescos de toda la Baja, directito del mar", son la especialidad. Popotla se cobija entre el gran cerro del Coronel y el océano Pacífico.

El pequeño poblado queda a pocos kilómetros del centro de Rosarito, en Baja California. Aquí viven más de 7 mil personas, en improvisadas casitas de madera. Unos subsisten de la pesca, otros de "jalar", son una especie de "recibidores" que pelean por atraer turistas estadounidenses a las pequeñas pescaderías.

Pero en Popotla se esconden muchos secretos, que son visibles para todos, menos para las autoridades mexicanas. Desde las aguas bajacalifornianas se trafican grandes cantidades de marihuana y cocaína hacia Estados Unidos y se ha establecido uno de los más fructíferos negocios del tráfico de indocumentados en el norte del territorio nacional.

Autoridades estadounidenses terminaron su año fiscal: los reportes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés) arrojan que hasta septiembre registraron más de 190 casos de contrabando marítimo en el sur de California. (EL UNIVERSAL)