Artículo de Christina Vuleta publicado en The Huffington Post

Las mujeres de hoy están disfrutando por fin sexo sin condiciones, libre de emociones. Estoy feliz por esta elección, pero me pregunto si una mujer de veintitantos se siente cómoda teniendo sexo sin emociones -o "sexo como un hombre", como a veces se dice. Ese fue el caso de Karen Owen, de la Universidad de Duke, cuyo análisis de su propia vida sexual se volvió viral, con una lista de conquistas y la crítica del desempeño de sus amantes. Algunos lo consideraron como un merecido castigo: por fin los hombres eran tratados como las mujeres lo han sido durante mucho tiempo. Otros pensaron que era una vergüenza que los hombres fueran sometidos al mismo tipo de objetificación que combaten las mujeres. Si aceptamos la palabra de la Sra. Owen - que su agenda no fue concebida para la vista del público - entonces es un caso de una mujer que tiene relaciones sexuales sin remordimientos y explora sus necesidades sexuales. Ella lamenta herir a otras personas, pero no se arrepiente de hacerlo. Ella no estaba teniendo sexo como un hombre, tampoco estaba teniendo sexo para conseguir un hombre. Ella lo hacía para sí misma.

Karen Owen creó un escándalo con su tesis.

A medida que los veinteañeros posponen el matrimonio, hay un largo período de limbo sexual. La pregunta no es con quién estás saliendo, sino con quién te estás acostando. No se trata sólo de una noche, sino vida sexual en curso, sexo sin compromiso. Es un juego de suma cero. Cada vez que tengas relaciones sexuales, regresas al punto de partida. No todas las mujeres en sus 20 están preparadas emocionalmente para manejar esto. Muchas todavía aspiran a una relación. De acuerdo con un estudio de mujeres en los 20 y en una etapa de transición, el 50 por ciento dice que el matrimonio es una prioridad. El estudio sobre el matrimonio de la Universidad de Rutgers dice el 94 por ciento de las veinteañeras buscan un alma gemela.

Entonces, ¿cómo se concilia este deseo de permanencia con la cultura del sexo casual? Un chico de veintitantos dijo: "Sé que si estoy saliendo con una chica (y acostándome con ella sin la intención de no acostarme con otras mujeres) y ella quiere más compromiso, puedo decirle que no y ella va a salir conmigo de todos modos". ¿Cómo reaccionan las mujeres ante esto? Una respondió: "Sé por experiencia personal que es verdad. Así que muchos chicos se sienten de esa manera. Es muy triste". Otra mujer de veintitantos me dijo que nunca había tenido una cita -y tenía miedo de no tenerla nunca. Ha incursionado con sexo casual, pero quiere tener una relación permanente. Lamentablemente, ella no siente tener control de la situación. Eso no suena liberador.

Así, ¿pueden estas mujeres realmente separar el sexo de la emoción? No las Karen Owens del mundo, sino las mujeres que secretamente anhelan una relación o que piensan que pueden tener sexo sin compromiso pero no tienen idea de en qué se están metiendo. Es confuso. Si un chico te dice que no quiere una relación, pero luego te presta atención, es fácil pensar que la atención es igual a algún tipo de apego emocional. Desde la perspectiva de una mujer de 28 años de edad, "un pequeño porcentaje de mujeres pueden decir 'Bien. Yo realmente no quiero nada más'. Muchas de mis amigas están fingiendo".

Después de tocar fondo con diversos problemas, la actriz Lindsay Lohan, de 26 años, quiere recuperar su vida, por lo que planea acudir a buscar ayuda con un profesional.

Al preguntar sobre el sexo sin compromiso, la idea de fingir surge con frecuencia. No se puede pretender querer sexo sin emociones cuando se está buscando una relación. Pero muchas de las jóvenes caen en esa trampa. Una veinteañera cuenta: "En el momento en que piensas 'Oh, tal vez podría enamorarme de él", perderás tu orgullo y querrás salir por la puerta."

Ahí es donde la perspectiva de las mujeres de cuarenta y tantos entra en juego. La mayoría de las mujeres de esa edad han aprendido que fingir sólo les impide encontrar lo que buscan. Una dama dijo: "Si quieres más compromiso y él no, entonces es el hombre equivocado. No puedes mentirte a ti misma y creer que el sexo se convertirá en un relación formal. No esperes que él cambie."

A medida que envejeces, experimentas diferentes tipos de relaciones y eres capaz de decidir si estás buscando una relación o si sólo quieres tener sexo. Por supuesto que es una opción, y es liberador, pero tienes que estar preparada para lo que significa. No significa nada. Eso no quiere decir que una aventura de una noche nunca se haya convertido en amor, pero no se puede entrar en una aventura con la esperanza de recibir amor.

Muchas mujeres de cuarenta y tantos han tenido sexo casual y no se arrepienten. No es de extrañar que mujeres de cuarenta y algo que se casaron con su primera y única pareja deseen haber tenido más. Los arrepentimientos son por haberlo hecho por las razones equivocadas. Si lo estás haciendo para otra persona o para tratar de ser otra persona, no es empoderamiento ni algo disfrutable. La historia de esta mujer lo ejemplifica:

Traté de ser super sexy y pensé que era una persona segura. Me puse la máscara de una persona liberada sexualmente en la cama. Qué pérdida de tiempo. Yo estaba tratando de demostrarle a todo el mundo que yo tenía el control. Era tan falso. Siempre estaba preguntándole al chico lo que quería en la cama. Yo no pedía nada. Si no se puede hablar de lo que se quiere en la cama, no se deben tener relaciones sexuales, es lo que pienso ahora. Tienes que hacerlo para ti misma. Yo estaba viéndome a mí misma proyectada a través de sus ojos. Creo que soy bonita si él dice que soy sexy. Eso realmente me dolía porque mi propia imagen dependía de los demás. Me casé con un hombre que me puso en un pedestal. Yo me veía como él me veía. Cuando caes del pedestal, y lo harás, entonces ellos descubren una mujer a la que no conocen. Y tú no te conoces a ti misma.

Mi mayor aprendizaje en todo esto es estar agradecida de tener la opción, pero no sentir que tienes que hacerlo sólo porque es lo que hacen los demás. Eso es tan malo como, en el pasado, lo era marcar a una mujer como "mala" por "hacerlo". Si decide hacerlo, explore y averigüe lo que quiere, pero respete su cuerpo y respétese a usted misma. Si puede hacerlo, diviértase y, sobre todo, tenga cuidado. Si no, ¡espere por lo que quiere y presérvese!