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Mérida, Yucatán, 11 de octubre de 2013.- El Centro de Rehabilitación y Educación Especial (CREE) es el lugar que le ha brindado esperanzas a Lupita Cab Cen, quien al vivir con espina bífida e hidrocefalia estaba destinada a no mover piernas ni brazos, pero su constancia en las terapias le ha permitido alcanzar logros que hace cinco años parecían lejanos.
Este día ese esfuerzo fue recompensado al recibir una silla de ruedas con aditamentos específicos que además de facilitar su traslado, contribuirán a incrementar los éxitos obtenidos con la ayuda de los especialistas de la dependencia.
La Presidenta del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) en Yucatán, Sarita Blancarte de Zapata, entregó a Lupita su primera silla de ruedas, aparato que en el mercado tiene un costo superior a los 12 mil pesos, pues cuenta con soportes laterales, ajustes a la altura del asiento y flexibilidad de extensiones, lo que permitirá que la niña pueda realizar sus actividades cotidianas con mayor seguridad.
“Agradecemos que nos apoyen con esto, yo no trabajo ni estudio porque desde que nació Lupita me he dedicado a ella. Mi padre es ayudante de albañil y mi mamá limpia casas, con eso apenas y salimos, sin esta ayuda jamás íbamos a poder darle esta silla a mi hermanita”, dijo emocionada Diana Cab Cen, quien dos veces por semana lleva a Lupita a sus sesiones en el CREE.
Junto con el director general del organismo asistencial, Limber Sosa Lara, la Presidenta del Patronato del DIF Yucatán abrazó a Lupita y la acomodó en su silla, al tiempo que reconocía la entrega de los familiares de la niña, que se preocupan por llevarla a sus terapias aún con las complicaciones propias de su condición económica.
“Vivimos en la colonia Emiliano Zapata Sur, está lejos del CREE pero cuando Lupita llegó a la casa dijimos que haríamos todo lo posible para que saliera adelante y hasta ahora estamos felices porque vemos que mejora, antes no gateaba, ahora ya sus manos las mueve muy bien, eso es por sus terapias”, platicó Gaspar Cab Mex, padre de la pequeña.
En esta oportunidad, Sarita Blancarte de Zapata también proporcionó una moto adaptada a la señora Silvia Espinoza Rosano, que a pesar de haber sido diagnosticada con distrofia muscular, trabaja como secretaria para mantener a su hija Isabel Aguilar Espinoza, de ocho años de edad.
“Trasladarme es un problema, a veces no llego a tiempo, no siempre hay vecinos que me ayuden a llegar a mi trabajo, por eso solicité una moto, pero me sorprendió la rapidez con la que atendieron mi petición y estoy agradecida por ello”, manifestó.
Tras una suma de voluntades entre el DIF y la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), doña Silvia tiene un vehículo adaptado a sus necesidades y en el que podrá continuar esa lucha por ganarse un sitio en la sociedad demostrando la entereza de aquellas personas que se enfrentan a la discapacidad.