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MORELIA, Michoacán, 18 de enero.- En Michoacán se necesita sustituir la presencia policíaca municipal por los cuerpos federales en las zonas en conflicto, eso hará que los policías coludidos con el narco dejarán de ser un brazo operativo para el crimen organizado, con lo que las organizaciones criminales quedarán desarticuladas, dijo Alfredo Castillo, Comisionado para la Seguridad y el Desarrollo Integral de Michoacán.
Mencionó en entrevista con Eduardo Ruiz Healy, que una vez que se haya hecho esa desarticulación, se tendrá que ir en dos ejes, el primero será de más fácil acceso ya que se podrán realizar las tareas de inteligencia sin que se boicoteen.
Consideró que, en ese sentido, es importante tener la construcción de casos que se puedan judicializar, a través de solicitudes de órdenes de aprehensión.
Por lo que es importante, agregó, armar los expedientes para que en el momento de que esas personas sean detenidas no se arraiguen, como en el pasado, pues es importante tener solidez en los casos, tener materia probatorio para consignarlos.
Alfredo Castillo reconoció que se tiene una tarea compleja, pero posible de sacar adelante para fortalecer el desarrollo integral y regresar al orden y la tranquilidad en la Entidad.
Explicó que la función de este nuevo órgano será articular todas las capacidades institucionales de las dependencias federales, a través, de sus delegaciones para tener una presencia física permanente en el estado, coadyuvar con el gobierno estatal en aras de fortalecer el desarrollo integral y lograr el orden y la paz en la Entidad.
Mencionó que la tarea está sujeta a la voluntad de todos los actores, de sumarse a la misma causa, porque la dispersión de recursos y esfuerzos no podrá lograr los resultados deseados,"y ahora que existe presencia federal en el tema de tomar el control de los municipios afectados, es importante que no sólo las autoridades locales vean el paso como una solicitud de ven y llévatelos; a la par se requiere tomar otro tipo de medidas para lograr el objetivo último".
Resaltó que en el sexenio pasado, cuando hubo presencia de policía federal en el 2007, pasaron dos situaciones que hoy se tiene que cuidar para que no vuelvan a suceder; el primer punto es que sí se tomó el control de regiones pero en aquel entonces no existía la estructura actual con la que cuenta la Policía Federal.
Los recursos y los policías entonces eran menores y, cuando empezó haber problemas en otros lugares se iban y dejaban el estado, lo que dio como consecuencia que grupos del crimen organizado retomaban el control de los territorios, pero de una manera más violenta y tomaban medidas en contra de quienes habían apoyado en su momento a las fuerzas federales.
Como segundo punto, precisó Castillo, es que a la par de esa intervención federal tampoco hubo un compromiso mayúsculo por parte de las policías municipales y, en muchas ocasiones las fuerzas estatales y ministeriales no se depuraban ni se modernizaban.
Subrayó que cuando se empieza a ver la cooptación de las fuerzas civiles, y no se tiene la capacidad federal para apoyar, lo que termina sucediendo es lo que ahorita acontece en Michoacán.
Finalmente, dejó claro que cuando las fuerzas federales tienen el control de todos los territorios y garanticen la seguridad de las personas, no existe razón alguna para que una persona considere que requiere de un arma de fuego para salvaguardar su vida y su patrimonio. (Agencia Quadratín)