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MEXICO, D.F., 31 de agosto.- Con las calles de la capital bloqueadas por protestas, una economía que languidece y desafíos de seguridad, el Presidente de México, Enrique Peña Nieto, presentará mañana su I Informe de Gobierno después de nueve meses en el poder.
La tensión de las calles, con manifestaciones un día sí y el otro también, ha sido moneda corriente en las últimas semanas en la capital.
Un ministro de su gabinete entrega mañana el documento por escrito al Congreso, como manda la Constitución. Y al día siguiente Peña Nieto dirigirá un mensaje político desde la residencia oficial de Los Pinos.
El Presidente, de 47 años, miembro del Partido Revolucionario Institucional (PRI, centro) que gobernó el país de 1929 al 2000, está enfrentando obstáculos luego de un tenso inicio. No sólo en cuanto a su intención de concretar reformas estructurales, sino también en seguridad, con el surgimiento de grupos de autodefensa que pretenden defenderse por propia mano y embates del crimen organizado, en especial en el estado de Michoacán.
"El Presidente Peña Nieto tuvo aciertos muy importantes en sus primeros meses de gestión con reformas importantes que rebasaron las expectativas de casi todos, pero ahora viene lo difícil", dijo Andrew Selee, del centro de pensamiento Wilson Center de Washington.
"Necesita instrumentar las reformas aprobadas y avanzar en materia energética, fiscal y financiera. Estos esfuerzos tocan intereses muy particulares y ya se ven las reacciones de sectores de la sociedad y poderes fácticos".
Para Selee, Peña Nieto llega al Informe "con una agenda muy intensa por delante y también mucha oposición de intereses afectados por las reformas, y tendrá que mostrar una claridad y firmeza en su visión para retomar la iniciativa que tenía hace unos meses".
La tensión de las calles, con manifestaciones un día sí y el otro también, ha sido moneda corriente en las últimas semanas en la capital. Las reformas educativa, energética y fiscal que impulsa el Gobierno son las que enfrentan resistencia. Hasta el fútbol se vio afectado.
El Gobierno capitalino hizo reprogramar dos partidos de Liga el fin de semana, incluido el campeón América contra los Pumas, porque consideró que, con tantos frentes abiertos, no tenía suficientes policías para todo.
El Palacio Legislativo de San Lázaro está cercado con un muro de vallas y agentes para evitar que los manifestantes impidan que se instale la sesión.
El Presidente Peña Nieto, que iba a dar su discurso el domingo desde un campo militar y luego viajaría a Turquía, optó por cancelar el viaje y cambiar la agenda para hacer una ceremonia más pequeña en su residencia.
Para el domingo, día de la presentación escrita del Informe, está prevista una gran marcha de maestros sindicalizados, junto a grupos como el movimiento estudiantil YoSoy132 y otros grupos sociales.
Y este sábado habrá una protesta, encabezada por el líder de Izquierda Cuauhtémoc Cárdenas, contra el proyecto de reforma constitucional en materia energética que busca permitir la participación privada en exploración y extracción de hidrocarburos. (Diario El Comercio)