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Nuevo León es un estado próspero, industrial, gran exportador, con una pequeña frontera con los Estados Unidos. Es un estado que hoy sufre ataques salvajes y despiadados dirigidos a la gente buena. ¿Lo dejamos así? En fin que está lejos de Yucatán, ¿o no?
Tamaulipas tiene ciudades como Reynosa en donde la vida se ha convertido en una pesadilla. Asesinan a alguien todos los días. Matan porque no se doblegan a sus deseos. Sólo entienden el lenguaje del fuego, de las balas, de las masacres, de las decapitaciones.
Durango está invadido en sus entrañas legales, esas que deben existir para defender al ciudadano, por el hampa, las mafias que en forma desesperada quieren imponer su fuerza. Corrompen a todo el que necesitan y si no sucumben, los matan. ¿Qué le quedaba a la carcelera si no les abría la puerta todas las noches para que salgan a matar?
La cantidad de armas incautada hasta hace una semana era de un millón *1,000,000* incluyendo las más pequeñas y las más grandes y poderosas, sin faltar granadas y demás recovecos para destruir vidas humanas. Sin embargo, hay voces que se elevan acusando a Calderón de haber hecho algo “indebido”.
¿Por qué no se hizo antes? ¿En donde están los que deben ser enjuiciados por no haber actuado? Zedillo y Fox, ambos, han declarado públicamente que están por la despenalización de la marihuana. ¿Una forma de decir por qué no lo combatieron como era debido? Fox habla de despenalizar todas las drogas. Habla de promover la creación de la industria de la producción de las drogas, para que los involucrados sean empresarios serios en vez de criminales armados, que, además, “no pagan impuestos”. El calvo millonario internacional, ¿qué opinará?
Algunos piensan que, aunque las libertades son sagradas, abogarían más por la promoción de la libertad sexual absoluta —respeto irrestricto a acuerdos entre adultos— que por la libertad de drogarse y convertirse progresivamente en un idiota. Pero allá están los jerarcas de la sociedad, los que “todo lo saben” y que hoy se rasgan las vestiduras por las bodas gay y porque a éstos se les permite adoptar.
El término es colombianizar el problema del narco en México. Es decir, pedir ayuda a los Estados Unidos y lanzar una ofensiva definitiva. ¡Ah, pero cómo va a ser eso! ¿Sacrificar “independencia”? Es seguro que Calderón y el Ejército y la Armada de México saben que allí está la solución… y también el más alto costo político. ¿Que sigan las viudas, los huérfanos y las masacres? Eso sí: ¡festejemos la independencia!