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1. Paquete a Santa. La gobernadora presentó proyectos por doscientas y no se cuantas obras más en la ciudad de México allá en la Cámara de los Diputados para solicitar
ampliaciones al presupuesto del gobierno del estado para el 2010. Cuando faltan apenas 2 meses para que la Sra. Ivonne cumpla la mitad de su mandato como titular del ejecutivo, comienza a cundir el pánico por la falta de obras públicas propias de su administracion. Dos calendarios y medio. Y por poner un ejemplo, no hay una sola carretera importante construida, ya que las que se han terminado o son federales o son conclusiones de las que el vilipendiado Patricio no pudo acabar. No hay un sólo proyecto relevante, no digamos en marcha sino siquiera iniciado a la mitad del trancurso de un gobierno que se ha ido entre voladores oropel, luces, candilejas y lentejuelas. La desesperación que denota el nohoch paquete de 225 obras es evidente. ¡Que ahora sí arranca el surtido de obras!
2. Indignada Parcialidad. Se ventila en un tribunal internacional el caso de Ricardo Ucán Seca. El tekaxeño fue preso y sentenciado en 2000 al final del período de Victor Cervera Pacheco, tío de la góber dzemuleña. El responsable del juicio y de la sentencia fue el Poder Judicial de entonces, que básicamente es el mismo Poder Judicial de hoy, designado y dominado por jueces y magistrados vinculados tanto ayer como hoy, por y para el PRI. Casi nada ha cambiado en ese Poder. Durante el sexenio panista de 2001 a 2007, insistentemente, indignados grupos de derechos humanos acusaron al gobernador emanado del PAN de mantener en la cárcel a Ucán Seca, procesado y condenado por homicidio durante el cerverato, en un caso que para entonces ya había sido cosa juzgada por otro Poder y que además poco competía al ejecutivo, sino fundamentalmente a la procuraduria cerveriana de entonces y mucho más al Poder Judicial, ese sí de entonces y de hoy. Se buscó hacer parecer el caso como un asunto de dzules panistas contra indígenas. Así se manejó en conferencias de prensa y extensas páginas de internet. La impresión que dan a veces ciertos grupos defensores de los derechos humanos, es que están más a la búsqueda de poses y clichés que puedan ser bien vendidos en ciertos públicos nacionales e internacionales, que por la genuina defensa de los derechos de los supuestos o verdaderos agraviados.
3. El mero punto del punto. Y para no salirme por la tangente, y para que no digan que le escurrimos al bulto, o que le sacamos al quid del asunto, hay que apuntar que no ponemos en duda que se hayan atropellado derechos procesales básicos de don Ricardo y que ello deba ser revisado exahustivamente. Eso no lo conocemos a profundidad, aunque sería interesante contar con amplia información al respecto. Lo que sí es por de pronto el objetivo de nuestro comentario es hacer notar la parcialidad con que el caso fue manejado por Indignación y otras agrupaciones para hacer ver al sexenio panista como el principal villano del caso, cuando en todo caso, hubo una muy acotada y limitada intervención en el asunto. En otro momento abordaremos otras interesantes aristas del caso.
4. Sacrificio a los dioses. Un reportaje de Excélsior revela lo que muchos sabíamos o sospechábamos. La hoy senadora Beatriz Zavala Peniche fue removida de la Sedesol y regresada al Senado, no en relación a alguna deficiencia en el excelente trabajo que realizaba en Desarrollo Social, sino más bien por caprichos presidenciales —para hacer enroques entre allegados Calderonistas, a saber Juan Camilo Mourino y Ernesto Cordero. A estos dos últimos el presidente quería mostrarlos más, a costa del sacrificio de la antropóloga social yucateca. En realidad el profesionalismo de Beatriz Zavala nunca estuvo a discusión. Fue una decisión por demas caprichosa e injusta de la presidencia. ¿Quién dijo que la vida es justa? Si la vida no lo es, la política, menos.
5. Partenón. Con nuestros poderosos binoculares se ha podido avistar un "Partenón Yucateco" rodeado de una gran muralla con una decena de cámaras de video High Tech que detectan hasta la hormiga más pequeña que pase por esa calle de San ramón Norte. Esta suntuosa residencia meridana es propiedad del jefe de la policía yucateca. Con valor de cuando menos 8 dígitos, nos recuerda una de las mayores lacras que ha tenido nuestro país. Nada más ni nada menos que la época del general Arturo Durazo Moreno, mejor conocido como el "Negro Durazo". Jefe de la policía capitalina en época de José López Portillo, fue un personaje negro en la historia de México. Casualmente, fue jefe del comandante Luis Felipe Saidén Ojeda. Es bien sabido que Saidén inició su carrera policíaca en el DF como motociclista de la policía bajo el mando de Durazo Moreno, a finales de los setenta e inicio de los ochenta. Muchos opinan que de ahí viene el aprendizaje de las prácticas arquitecónicas que hoy se ven en la casita del comandante Saidén, así como el uso de una gran escolta compuesta por motocicletas, camionetas blindadas y muchas veces hasta el helicóptero de la policía —tal como se desplazaba el "Negro" Durazo. El partenón que Durazo se contruyó en el DF sigue siendo hasta hoy ícono de la corrupción policíaca de esas épocas.
6. Danza de sueldos. Se ha revelado que el alcalde Peniche Bates de Tizimín se manda un sueldito de 150 mil morlacos mensuales. Según se afirma, un tostón sobre la mesa, en nómina y además un cienpiés como "compensaciones", para totalizar los ciento cincuenta mil. La gobernadora dijo que de sueldos de alcaldes ella lo que sabe es: nadita. Lo curiosito del caso es que a un mes de revelado por A7, tampoco nadie ha dicho ni pío del falso descuento de la mitad del sueldo que por decreto de la misma gobernadora debiera hacerse automáticamente de las percepciones de la ciudadana Ivonne Ortega Pacheco. Ningún otro periódico local se ha atrevido, aunque sea tímidamente a cuestionar: ¿por qué cuando debería, según ella misma, descontarse la mitad, a la señora gobernadora, se le siguen pagando enteritos, sin ningún centavo de descuento sus más de ciento cuarenta mil pesos mensuales? ¿Podrá exhibir públicamente las cuentas, ingresos y egresos del programa "Compartir"? Pero eso sí, el golpe mediático de la donación de su sueldo ¡dado quedó! Y golpe dado ni...
7. Sueños, sueñitos y siestas después de comer. Hasta a los cocineros (a los propios y otros de postín, alquilados) llevó la gobernadora al DF, para conseguir que los diputados federales aprueben en la Cámara que se le apadrinen las 225 obras de las que hablábamos entre sueños líneas arriba. Pero también se llevó doña Ivonne a la mitad del gabinete para acompañarla en las presentaciones y el cabildeo en San Lázaro. "El banquetero Rígel González ha estado muy activo ofreciendo banquetes en la ciudad de México a nombre del gobierno del estado", contó indiscreto el mismo Rígel en uno de sus múltiples viajes aéreos que para cumplir con esos compromisos ha dado a la metrópoli.