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Mérida, Yucatán, 16 de noviembre de 2013.- El diputado federal del PRI, Mauricio Sahuí Rivero, señaló que con las reformas a la Ley General de la Infraestructura Física Educativa aprobadas por la Cámara Baja se garantizará la instalación de bebederos y el suministro suficiente de agua potable en las escuelas del país, y combatir el alto consumo de bebidas azucaradas entre los alumnos.
En el marco de la Jornada Comunitaria de Limpieza que se realizó en la escuela Felipe Carrillo Puerto de la colonia Juan B. Sosa, el legislador yucateco explicó que se dará prioridad a las instalaciones con más de 100 alumnos y se procurará que todas cuenten con bebederos de agua potable en un plazo máximo de tres años, a partir de la publicación del decreto aprobado.
Acompañado de su esposa Yamile Seguí y su hijo Mauricio, el coordinador de los diputados federales del PRI por Yucatán participó en las tareas en la que participaron madres de familia y maestros del plantel quienes con brocha gorda en mano pintaron salones de clase para darles una nueva imagen.
Dijo que la adopción de esta medida evitará que los alumnos opten por el consumo de bebidas azucaradas e incidirá de manera favorable en sus hábitos de consumo.
El sobrepeso y obesidad se han acentuado en México, registrando un incremento significativo en los últimos años, lo que se ha convertido en un problema sanitario que afecta a la productividad de las empresas, el desempeño escolar y el desarrollo económico del país.
En el caso de los planteles educativos particulares, estarán obligados a instalar bebederos en cantidad suficiente a su matrícula inscrita en el término de un año, a partir del día siguiente a la publicación del presente decreto.
El 40 por ciento de las escuelas en el país no cuenta con este servicio y se pronunció porque el Presupuesto de Egresos de la Federación garantice recursos para que los colegios tengan agua potable.
En el caso de población en edad escolar, de cinco a 11 años de edad, la prevalencia nacional combinada de sobrepeso y obesidad en 2012 fue de un 34.4 por ciento, poniendo en riesgo a 5.6 millones de infantes.
Con esta reforma que debe ratificar el Senado de la República se beneficiarían 242 mil 621 escuelas, que representan el 96 por ciento del total de los edificios escolares, así como a 30 millones 115 mil 977 alumnos del sistema educativo nacional.
De acuerdo con el Centro de Estudios de las Finanzas Públicas de la Cámara de Diputados, la valoración del impacto presupuestario de esta iniciativa implicará una inversión de nueve mil 678 millones de pesos, divididos en tres años. El primero, de poco más de tres mil 500 millones de pesos.