Guadalajara, Jalisco, México, marzo 13 de 2017

México tuvo que sacar la calculadora para conocer si obligaría el juego de desempate o no, en el Clásico Mundial a pesar de haber derrotado 11-9 a Venezuela en la casa de los Charros. Y al final, después de mucha confusión entre periodistas, aficionados y hasta el mismo comité organizador, se determinó que Venezuela jugará hoy el partido de desempate ante Italia.

Tras el pelotazo de Jake Sánchez a Robinson Chirinos, en la séptima entrada, Venezuela anotó una carrera que, de acuerdo al criterio de desempate publicado por el Comité Organizador dejaría fuera a México.

Los anfitriones se impusieron, pero tras una corrección se anunció que los venezolanos jugarán el desempate ante los italianos.

Ni siquiera el personal de Grandes Ligas en el estadio se pudo poner de acuerdo durante el juego para determinar cómo aplicar el reglamento, por lo que anunciaron que hasta el final del juego se reuniría un comité técnico para dar a conocer oficialmente a los dos que jugarían hoy.

Ganamos por dos y perdimos por una, Venezuela pierde por dos y gana por una. Que mal torneo organizado.

— Adrián González (@Adrian_ElTitan) 13 de marzo de 2017

La ambigüedad en el reglamento del torneo era que el primer criterio de desempate correspondía a la división entre carreras permitidas entre el número de entradas defendidas, incluyendo entradas parciales.

El problema fue que, de acuerdo al boxscore oficial del juego, ponía a México con 8 entradas defendidas y en el factor de desempate, Venezuela se quedaba con el desempate.

Sin embargo, al final el comité técnico determinó dar por válida la entrada y con ello la oportunidad para México de enfrentar a Italia con el boleto a la Segunda Ronda. Aunque minutos después desechó la decisión y se anunció que serán los venezolanos los que se medirán a Italia en el juego de desempate.

La gente en las gradas ni se inmutó por las combinaciones, por el dramatismo que tuvo el juego, luego de que dos jonrones de 3 carreras le dieron una ventaja cómoda a México de 8-1, pero luego el bullpen falló y complicó los cálculos.

Entre Carlos Torres, Vidal Nuño y Sergio Romo permitieron 7 carreras que apretó el juego y puso de nervios a la gente, que se preocupó más por el juego, que por el criterio de desempate.

Tuvo que llegar Oliver Pérez y finalmente Roberto Osuna, aunque con drama, para bajar la cortina y sellar el boleto después de la deliberación del comité.