JAPÓN, 6 de octubre.- Desde hace más de tres años, Kazuyuki Kobayashi desapareció. Trabajaba en un restaurante japonés y se hizo humo desde mayo de 2009, sin dejar evidencias. No hubo avances hasta que la encuesta se aceleró de repente a finales de septiembre. Las sospechas llevaron a tres hombres que estaban en contacto con la víctima poco antes de su muerte, quienes coincidieron en la cárcel por fraude, cada uno por separado. Fueron llevados a la Policía Metropolitana de Tokio para ser interrogados el 27 de septiembre.

Kazuyuki Kobayashi, la víctima.

Dos de los tres individuos (Tasuku Shimaoka, Keita Koji y Yoshida Kawamura) han confesado haber matado a Kazuyuki Kobayashi en 2009, cuando fue a cobrarles un préstamo. Procedieron a congelar su cuerpo en Tokio a la espera de encontrar una manera de deshacerse de él. Después de más de un año de reflexión, optaron por desmembrar el cadáver de Kobayashi con una herramienta parecida a un martillo; luego tiraron sus miembros en las montañas, al norte, en la prefectura de Niigata.

Un guiso de curry.

Sin embargo, decidieron utilizar algunas partes del cuerpo, que cocinaron en una salsa de curry, conocido por su fuerte olor, que puede ocultar casi cualquier cosa. Los sospechosos no han confesado si ellos se comieron el platillo o lo vendieron.

Los tres cómplices son procesados ​​por el desmembramiento de Kobayashi para dar tiempo a los investigadores a proporcionar más evidencia en el expediente. (Paris Match)

Tasuku Shimaoka, Keita Koji y Yoshida Kawamura