Hepatitis B y C, e incluso VIH/Sida, los contagios más frecuentes. También puede llegar a deformar, de manera permanente, la zona perforada.

La colocación de un piercing o la realización de un tatuaje puede ser la causa de la aparición de infecciones por virus transmitidos a través de la sangre, como los de la hepatitis B y C o el del sida (VIH). Estas prácticas también pueden provocar infecciones por bacterias u hongos.

Los tatuajes representan hoy día un riesgo asociado a la infección por hepatitis C, dijo la doctora Alejandra Iglesias López, del servicio de Dermatología del Hospital General de Zona número 26 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).

Los síntomas de un proceso infeccioso asociado, como secreción purulenta, dolor y fiebre, pueden aparecer después de varios días, por lo que en muchos de los casos los pacientes acuden tardíamente con el médico para ser atendidos, lo que provoca  la presencia de complicaciones.

La perforación para el piercing o la realización de un tatuaje, explicó la dermatóloga del Seguro Social, representa una agresión para la piel. Los piercings y los tatuajes tienen dos factores en común: romper la barrera de protección natural del cuerpo humano, compuesta por piel y mucosas, y el riesgo de la aparición de una infección.

Desde tiempos antiguos, el hombre y la mujer han decorado su cuerpo con la introducción de varios objetos en las partes visibles del mismo o con la inserción de pigmentos bajo la piel. Pero en los últimos años, la práctica de este tipo de decoración corporal se ha extendido y se ha convertido en una moda estética.

La doctora Iglesias López explicó los riesgos de realizarse una perforación en mucosas  y genitales (práctica que en los últimos años se ha extendido), así como en labios, lengua y nariz.

Las mucosas facilitan que el virus, la bacteria o el hongo lleguen con más facilidad al torrente sanguíneo. En la boca, por ejemplo, existen varios mecanismos de defensa en contra de agentes infecciosos. La perforación del labio o de la lengua favorece la aparición de infecciones, por lo que podrían activarse estos mecanismos, presentándose una intensa inflamación en la zona donde se realizan.

El tratamiento que los médicos del IMSS proporcionan a los derechohabientes que desarrollan infección por una horadación en la piel, consta de antibióticos, antisépticos secantes y medidas higiénicas. Si el paciente no tiene problemas con su sistema de defensas, en 8 o 10 días logrará una recuperación completa, estimó la dermatóloga Iglesias López.

Al referirse a las medidas de prevención que debe tomar quien desee realizarse una perforación para un piercing o un tatuaje, la especialista del IMSS destacó, en primer lugar, acudir a un sitio autorizado que cumpla con las medidas de higiene y evitar perforar las zonas de mayor riesgo de infección: como los genitales y las mucosas (lengua y labios).

Agregó que la emoción de estar a la “moda” al realizarse estos procedimientos (tatuajes y perforaciones), conocidos entre algunos grupos de jóvenes como body art, deja a un lado la gran dificultad que implican su corrección, sobre todo los tatuajes, que requieren de procedimientos costosos, como láser (que no están al alcance de cualquiera) y quirúrgico, con el que los resultados no son siempre tan satisfactorios; o bien la generación de cicatrices deformantes en quienes tienen la tendencia genética a desarrollarlos y no lo sabían. Boletín de la delegación del IMSS en Yucatán.