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SANTIAGO DE CHILE, Chile, 8 de noviembre.- Los expertos chilenos y extranjeros que examinaron los restos del poeta Pablo Neruda descartaron que el ganador del Premio Nobel de Literatura en 1971 haya muerto envenenado tras el golpe militar de 1973, informaron hoy fuentes oficiales.
Durante los exámenes, que se desarrollaron desde el pasado abril, cuando el cuerpo de Neruda fue exhumado, "no se encontraron agentes químicos relevantes que pudieran relacionarse con la muerte" , dijo a los periodistas Patricio Bustos, director del Servicio Médico Legal (SML) de Chile.
Agregó que los análisis toxicológicos efectuados en los restos óseos del poeta "acreditan la presencia de productos farmacéuticos para el tratamiento de enfermedades cancerosas, específicamente del cáncer de próstata, que eran utilizados en la época".
El cuerpo presenta lesiones metastásicas que permiten confirmar, "por diversas técnicas complementarias entre sí" la "correspondencia con la enfermedad" , precisó Bustos.
"No se ha encontrado evidencia forense alguna que permita establecer una etimología médico legal por causas no naturales en la muerte del señor Pablo Neruda" , remarcó.
Así, los exámenes corroboraron la versión original de que fue el cáncer de próstata que padecía el que precipitó la muerte del autor de Canto General y Veinte Poemas de amor y una canción desesperada, entre muchas otras obras, el 23 de septiembre de 1973, en una clínica de Santiago.
A las 10 y media de la noche del 23 de septiembre de 1973 Pablo Neruda murió. El doctor Vargas Zalazar ya se había retirado y al día siguiente emitió el acta de defunción. En la imagen, con su tercera esposa, Matilde Urrutia. (GDA/El Mercurio).
Dicha versión tuvo una aceptación generalizada hasta mediados del 2011, cuando se abrió una investigación judicial a raíz de una querella presentada por el Partido Comunista, del que Neruda era militante, tras conocerse unas declaraciones de su antiguo chófer, Manuel Araya, a la revista mexicana Proceso.
Según Araya, Neruda fue envenenado con una inyección en la clínica en estaba internado, por agentes de la naciente dictadura de Augusto Pinochet.
La investigación quedó a cargo del juez Mario Carroza, quien ordenó la exhumación del cuerpo, sepultado junto a la casa de Neruda en la localidad de Isla Negra y a quien los expertos, que estaban reunidos en Santiago desde el pasado martes, entregaron hoy sus conclusiones.
En las pericias participaron cinco expertos del Servicio Médico Legal (SML), cuatro de la Universidad de Chile y cuatro extranjeros, la toxicóloga estadounidense Ruth Winecker y tres españoles, encabezados por Aureliano Luna.
Algunas muestras de tejidos de Neruda fueron examinadas en la Universidad de Carolina del Norte y en la española Universidad de Murcia.
El sobrino de Pablo Neruda, Rodolfo Reyes, insistió en que no hay dudas de que terceras personas están involucradas en la muerte del poeta y que pedirán nuevas diligencias.
"Efectivamente este es un primer detalle respecto del contenido de los peritos, pero que dan mucho y seguiremos con otra perspectiva de averiguar de que murió Pablo Neruda. Nosotros no nos quedamos conformes con esto, pero es un resultado efectivo", dijo Reyes.
Además, agregó que "falta todavía hacer un examen, no hay la menor duda de que en Neruda se interfirió en su muerte. Va a recién iniciarse un segundo paso de la investigación, no está aún la prueba de ADN".
Por su parte, el abogado querellante, Eduardo Contreras, aseguró que aún falta la pericia toxicológica para analizar existencia de gas sarín, el cual desaparece del cuerpo luego de un cierto tiempo.
"Lo que hemos recibido parcialmente es una demostración del interés nacional e internacional, nos parece que efectivamente es un paso muy importante y significativo y esto busca establecer la verdad histórica", dijo el abogado.
"Una son las pericias médicas que ellos mismos ponen en duda porque han pasado muchos años, hay elementos que desaparecen como el gas sarín. El caso no se cierra hoy día, vamos a solicitar nuevas muestras", agregó Contreras. (Agencias)