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Mérida, Yuc., México, noviembre 28 de 2017
En épocas de frío y ante los cambios bruscos de temperatura se incrementan las consultas por Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), padecimiento que ocasiona dificultad para respirar y se detecta generalmente en personas que tienen el hábito de fumar o solían fumar.
También se presenta en quienes pasan largos periodos de exposición al humo de carbón, leña o vapores de sustancias químicas; así como en aquellos que laboran en pozos, sumideros y lugares con gran presencia de humedad u otros irritantes de los pulmones; también puede afectar a personas con algunas alteraciones genéticas infrecuentes.
Manuel Alejandro Pasos Mestre, jefe de la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital General Regional No.1, informó que ante los cambios bruscos de temperatura, la EPOC se descontrola y se agudizan sus síntomas, como: la falta de aliento, presión en el pecho, sibilancias (sonidos silbantes cuando se respira), producción de flemas y tos; ya que las personas en general están más expuestas a cuadros de catarro.
Los pacientes que ya tienen el diagnóstico de esta enfermedad también pueden manifestar cuadros infecciosos severos, acompañados de insuficiencia respiratoria, poniendo en riesgo su vida.
El IMSS recomienda atender cualquier catarro o tos que dure más de 10 días, se evite la automedicación y se acuda con el médico familiar para recibir el tratamiento pertinente y en caso de ser necesario sean canalizados con el especialista correspondiente.
Este padecimiento es de las enfermedades crónicas que va en aumento debido en su mayoría por el alto índice de tabaquismo. Esta enfermedad puede presentarse hasta en personas de entre los 27 o 30 años de edad, debido a que empezaron a fumar a los 12 años ignorando los riesgos y complicaciones.
“… Lamentablemente la población empieza a fumar muy joven y esto puede generar que el paciente comience a una edad muy temprana con complicaciones y problemas respiratorios”, señaló Pasos Mestre.
La EPOC aparece lentamente y si no se recibe atención médica, los síntomas aumentan hasta limitar la capacidad de la persona para realizar sus actividades cotidianas, por ejemplo, caminar.
En el IMSS en Yucatán, los médicos otorgan atención y seguimiento a los pacientes con este diagnóstico; además de que se les otorgan tratamientos y recomendaciones para mantener estilos de vida más saludables con la finalidad de que se sientan mejor y puedan retrasar la progresión de la enfermedad.
“Una vez diagnosticado el padecimiento, como dice su nombre, es crónico, degenerativo y progresivo, lo único que podemos hacer es disminuir la velocidad de la evolución; sin embargo, el factor principal para disminuir la incidencia de esta enfermedad es evitar el tabaquismo y la exposición al humo y polvo”, destacó el especialista del Seguro Social.
Finalmente, Pasos Mestre recomendó, principalmente: evitar fumar, así como no exponerse a cualquier tipo de humo, abrigarse bien, mantener adecuados hábitos higiénico-dietéticos, consumir alimentos ricos en Vitamina C, lavarse muy bien las manos; además de acudir a la Unidad de Medicina Familiar para solicitar las vacunas que les correspondan, ya que la inmunización es segura y evita muchas otras complicaciones.