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México, D.F., 18 de agosto de 2013.- El primer priísta del estado, Rolando Zapata Bello, asistió esta tarde a la sesión de la Comisión Política Permanente del Partido Revolucionario Institucional (PRI), en la que, bajo el lema “México se transforma con energía”, se expresó el apoyo absoluto a la Reforma Energética propuesta por el Presidente de la República, Enrique Peña Nieto.
En el evento efectuado en el auditorio “Plutarco Elías Calles” del Comité Ejecutivo Nacional del Partido, se destacó que la dicha Reforma será un motor de desarrollo que permitirá un crecimiento del siete por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) y dará lugar a ahorros sensibles en la importación de gasolina y gas.
Asimismo, se dijo, permitirá la generación de empleos dignos y bien remunerados, además de mejores condiciones de recaudación para el Estado mexicano, que busca mejorar la salud y la educación, además de disminuir la pobreza y la desigualdad.
El líder del Partido, César Camacho, afirmó que “es hora de demostrar que podemos ser una potencia mundial energética y crecer para generar riqueza y repartirla”, postura que fue respaldad por Zapata Bello, sus homólogos priístas, legisladores y los representantes de la Confederación Nacional Campesina (CNC), la Confederación Nacional de Organizaciones Populares y el Congreso del Trabajo.
En su intervención, el especialista en materia energética Francisco Labastida Ochoa destacó que a la fecha el país importa más de 15 mil millones de dólares en gasolina y siete mil millones de gas, lo que plantea la necesidad de modernizar en el corto plazo esta industria, incluyendo los sectores del petróleo, el gas y la electricidad, a fin de lograr un desarrollo sustentable para la población.
A su vez, el líder de los diputados, Manlio Fabio Beltrones, destacó que la Reforma no solamente ve al interior del país, sino que amplía el horizonte externo, como lo proyectó en su momento el ex presidente Lázaro Cárdenas.
En ese contexto, Emilio Gamboa Patrón y el líder de la CNC, Gerardo Sánchez García, reiteraron que de no lograr las transformaciones necesarias, la industria energética nacional se convertirá en un lastre para la nación, con el riesgo de que 90 millones de compatriotas estén en situación de pobreza, en el corto plazo.
En el evento priísta, se cuestionaron los planteamientos de los detractores de la Reforma, enfatizando que Pemex y la CFE, ni se venden ni se privatizan.