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MEXICO, D.F., 4 de diciembre.- Políticos del PRD solicitaron formalmente a la Cámara de Senadores que se suspenda el procedimiento legislativo de la Reforma Energética hasta que se lleve a cabo la consulta popular en la materia; de lo contrario, están dispuestos a judicializar la reforma.
Este martes, luego de una marcha que culminó en el Senado de la República, diputados, senadores y militantes del PRD encabezados por su dirigente nacional, Jesús Zambrano, entregaron al presidente de la Cámara, Raúl Cervantes, 1 millón 672,242 firmas de personas que respaldan que la reforma energética se someta a consideración de los mexicanos mediante una consulta popular.
Los documentos entregados contienen la firma, clave de elector, número de credencial para votar y nombre completo de los ciudadanos que buscan la aplicación del artículo 35 de la Constitución, que permite la consulta en temas “de trascendencia nacional”.
La vicepresidenta del PRD en el Senado, Dolores Padierna, afirmó que si el Congreso avala una reforma energética que modifique los artículos 27 y 28 de la Constitución pese a que se cubrieron los requisitos para la consulta, su partido irá a las últimas consecuencias en el terreno legal.
El senador Alejandro Encinas dijo que la consulta se debe hacer a través del Instituto Federal Electoral o, en su caso, por el nuevo Instituto Nacional Electoral. Si hay negativa, el PRD llegará a la controversia ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
Asimismo, Jesús Zambrano destacó que no sabe si el PRD regresará al Pacto por México de aceptarse la reforma energética.
“No hay ninguna razón para que nosotros modifiquemos la decisión de seguir fuera del Pacto por México y quién sabe si regresaremos, si continúan (PRI, PAN y gobierno federal) con su decisión de darle para adelante, a como dé lugar, a reformas que están trastocando o van a trastocar la vida del país”, dijo.
Expuso que el PRD seguirá con la recopilación de firmas para dejar abierta la puerta a los ciudadanos que quieran adherirse a la petición de una consulta popular en materia energética.
La premura por la aprobación de una Reforma Energética con cambios constitucionales que permitan la inversión privada en la cadena de valor de hidrocarburos y la comercialización de electricidad en este periodo de sesiones provocaría incertidumbre entre inversionistas y desconfianza en la población, por lo que posponerla hasta el siguiente periodo de sesiones resulta la mejor opción, afirmaron desde el Consejo de Administración de Petróleos Mexicanos (Pemex) y el PRD.
De acuerdo con el asesor del Consejo de Administración de Pemex, Carlos Huerta, la prontitud no debe ser el objetivo de la reforma por un cálculo político de coyuntura, ya que la industria energética es de largo plazo y una reforma sin legitimación política y social, como la que se plantea aprobar antes del 12 de diciembre, no tendrá certeza jurídica a largo plazo ni incentivos para la inversión.
Y es que, según él, la verdadera preocupación por parte de los inversionistas potenciales se enfoca en que se logren acuerdos con la fracción disidente a los cambios, ya que esto garantizaría que se respetarán los contratos que se logren implementar.
El consejero aseguró que México debe reflejarse en el espejo de Argentina, Bolivia y Ecuador, donde al hacerse reformas sin la legitimación necesaria se revirtió el proceso, siendo muy costoso para sus naciones y para los nuevos operadores.
Postergar la discusión, dijo, enviaría un mensaje positivo: “Sería una muestra de prudencia política de proporciones significativas y su posposición sería prácticamente de 45 días. El próximo periodo ordinario comienza el 1 de febrero del 2014”, aseguró a El Economista.
Por su parte, la senadora del PRD, Dolores Padierna, explicó que postergar la discusión daría también certeza entre la población, ya que la trascendencia del tema implica profundidad en el análisis y difusión de sus contenidos, para lo cual el tiempo en este periodo de sesiones ya es muy poco. (El Economista)