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Lima, Perú, 07 de diciembre de 2022
El Congreso de Perú destituyó este miércoles al presidente izquierdista Pedro Castillo por “incapacidad moral”, ignorando la decisión del mandatario de disolver el Parlamento.
La destitución de Castillo fue aprobada por 101 votos de un total de 130 congresistas. La votación se realizó en la sede del Congreso y fue transmitida en directo por la televisión.
Castillo había sido convocado al Congreso para que responda a acusaciones de “permanente incapacidad moral” para gobernar, en medio de varias investigaciones de fiscalía de presunta corrupción.
Para expulsar a Castillo se necesitaban 87 votos, que corresponden a dos tercios de los 130 miembros del Congreso.
Estados Unidos había rechazado cualquier acto inconstitucional de Castillo para impedir que el Congreso cumpla con su mandato, dijo el miércoles el embajador estadounidense en el país andino, Lisa Kenna, en Twitter.
Castillo, un líder de izquierda que asumió al poder en julio del 2021, había anunciado un gobierno de “excepción” , al tiempo que convocaría en el más breve plazo a elecciones legislativas, con facultades constituyentes, para elaborar una nueva Constitución en un plazo no mayor de nueve meses.
El presidente anunció asimismo la reorganización del Poder Judicial, la fiscalía y el Tribunal Constitucional, y refirió que durante el periodo de “interregno” por el cierre del Congreso se respetará el actual modelo económico del país.
Hace tres décadas, el exmandatario Alberto Fujimori, actualmente preso por abusos a los derechos humanos y corrupción, ordenó también la disolución del Congreso, con similares medidas en torno al sistema judicial.
“En atención al reclamo ciudadano a lo largo y ancho del país tomamos la decisión de establecer un gobierno de excepción orientado a restablecer el estado de derecho y la democracia”, dijo Castillo en un discurso.
Castillo también declaró un toque de queda a nivel nacional desde la noche del miércoles hasta la madrugada del jueves y pidió a los que poseen armas ilegales las entreguen a la policía en un plazo de 72 horas, bajo pena de cárcel si no lo hacen.
Varios legisladores de oposición consideraron la decisión de Castillo como un “golpe de Estado” e hicieron llamados a las fuerzas armadas para “restablecer el orden constitucional”.
Además, todas autoridades del sistema judicial condenaron la decisión de Castillo. “Es un golpe de Estado, un quebrantamiento del orden constitucional”, dijo en conferencia de prensa el presidente del Tribunal Constitucional, Francisco Morales.
El presidente del Congreso, José Williams Zapata, convocó a las 15:00 hora local a la vicepresidenta Dina Boluarte para que asuma el poder y complete el periodo hasta el 2026.
Boluarte, una abogada de 60 años que fue hasta hace poco ministra de Inclusión Social, estaba siendo investigada por el Congreso por una supuesta infracción constitucional, pero el Legislativo la absolvió esta semana de todos los cargos.