México (4 de diciembre).-

Detrás de la salvaje imagen y agresiva voz que explota en Slipknot, Corey Taylor no es más que un hombre sencillo con gustos que rayan en lo nerd, pues ama las series de ciencia ficción, los cómics y las películas de superhéroes.

En enero cumplió uno de sus más grandes anhelos: recorrer el set donde graban la última temporada de Doctor Who, serie de la que es gran fan.

“Lo chingón del asunto es que tocábamos en Cardiff, Gales, donde graban el show. Unos productores son fanáticos nuestros y nos invitaron al estudio, donde vivimos una experiencia increíble.

“Estaba jodidamente emocionado. Y más cuando me platicaron que querían que le diera mi grito a una bestia que aparecerá. ¡Por supuesto que dije que sí! El capítulo ya salió y se llama ‘Before the Flood’”, explicó en entrevista.

El vocalista de la agrupación, que toca mañana por vez primera en el País en el Knot Fest, en el Foro Pegaso de Toluca, compartió una historia más sobre su afición a lo fantástico, que vivió cuando lo invitaron a ver Avengers antes que nadie.

“Amo los cómics de Marvel, las figuras de acción y sus películas. De hecho, pude ver antes que la nadie la primera parte de Avengers, porque la gente que trabajó allí sabe que me encanta todo esto.

“Lo chistoso es que estaba sentado detrás de Clark Gregg, y cuando matan a su personaje (el agente Phil Coulson), perdí el control. Grité y todos voltearon, fue algo increíble”, pormenorizó. Agregó que disfruta transmitirle esta pasión a sus hijos y que antepone a sus vástagos ante cualquier situación y busca protegerlos.

Por eso, está preocupado por la violencia que se vive en Estados Unidos, cuyo último brote sucedió el miércoles en un tiroteo, en San Bernardino, California.

“Es difícil. Soy un padre preocupado por ese tipo de locura que rodea a mis niños y a la gente que amo. El problema se complica porque la gente toma dos bandos: los que se oponen a las armas y quienes defienden su posesión.

“Y en lugar de hablar, sólo discuten y chocan sus cabezas. Mientras no haya argumentos, jamás llegaremos a solucionar nada”, señaló.

La banda, de la que forma parte desde hace 18 años, es una familia para él. Un tanto disfuncional, pero llena de individuos a los que ama.

“Es difícil mantener la cordura general, punto. Son mis hermanos, pero son personas difíciles. Tratamos de salir a flote por los fans, pero deben comprender que somos humanos, como todo el mundo.

“Pero nos preocupamos. Por ejemplo, cuando Mick (Thompson, guitarrista) sufrió una cuchillada en la cabeza, fui el primero en ir al hospital a verlo ya que siempre será mi hermano”, compartió.

Taylor, de 41 años, ya había venido a México en 2012 con su grupo alterno, Stone Sour, pero encuentra fascinante venir con Slipknot y premiar a sus fanáticos con una presentación que inmortalizará en DVD.

“Es importante para todos capturar este momento. El Knot Fest de aquí será completamente diferente y queremos que esa pasión que he vivido quede allí”, finalizó.