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México (19 de enero).-
La Red por los Derechos de la Infancia en México (Redimm) señaló que el ataque armado en el Colegio Americano del Noreste en Monterrey, Nuevo León, no debe de provocar una criminalización en contra de los jóvenes, pues este fue un ataque aislado.
“De todo el universo de delitos en México, menos del 4 por ciento tienen implicación de adolescentes, por tanto no es un ataque generalizado; el riesgo de este hechos es que se use políticamente para criminalizar a los adolescentes, para pensar que todos son potenciales disparadores”, indicó el activista Juan Martín Pérez.
Lo cierto es que este atentado es el resultado directo de la falta de implementación de políticas públicas en torno a la juventud que deberían ser generadas por el Estado mexicano, dijo.
“El Gobierno mexicano no fomenta una cultura de paz entre los niños y adolescentes, además existen más de 3 millones y medio de armas pequeñas en nuestro país sin control”.
Juan Martín Pérez recordó que a diez años del inicio de la guerra contra el narcotráfico, los adultos no han explicado a los niños y adolescentes las causas de la violencia y las maneras de evitarla.
“No hay hasta ahora ninguna política pública destinada a este fin para la niñez y adolescencia mexicanas, que representan casi 40 millones de personas, que tenga una explicación sobre lo muertos, los disparos, los desaparecidos y es urgente que esto se haga desde el Estado”.
Por ahora resulta necesario recordar que las familias trabajen con los menores para prevenir la violencia. “Esta puede ser revertida desde la convivencia pacífica con justicia y creo que ellos podrán revertirla”, concluyó.