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Guadalajara (15 de mayo) La indiferencia del personal docente al impartir clases, es decir, omitir las opiniones de sus alumnos, es una práctica que llega a ocasionar ausentismo, bajo rendimiento de los bachilleres e incluso deserción escolar, asegura el experto Javier Jorge Boyzo Nolasco.
Lo que proponen es la interacción con los alumnos y su motivación a través de contenidos digeribles y multimedia que faciliten la comprensión del alumnos, herramientas dinámicas para fomentar su aprendizaje y reflexión.
A su vez, Solís Bocanegra manifestó que es urgente considerar el impacto de “la conducta y el estilo docente tradicionalista que aún predomina, disfrazado con actividades que aparentemente se basan en las competencias” en el sistema educativo y el desempeño del alumno.
Indicó que en ocasiones el profesor es el que dirige y el centro de todo lo que pasa en el salón de clases, “es el que tiene la última palabra, habla demasiado, dirige a los estudiantes sin que ellos sean los protagonistas del aprendizaje, es un profesor de pizarrón y de copias”.
Resaltó que por ello, estudian los métodos de enseñanza de profesores de la Preparatoria 12 y de la Preparatoria de Autlán de Navarro.
Precisó que entre los instrumentos que aplican se encuentran las encuestas, en las cuales también se toma en cuenta la opinión de los estudiantes, con la intención de que el maestro se dé cuenta de si realmente se basa en un verdadero enfoque por competencias.
Por su parte, Aguirre Coronado explicó que otros factores que intervienen en el proceso enseñanza-aprendizaje son la gran cantidad de estudiantes que el docente debe atender al mismo tiempo en el aula.