México (15 de mayo) La guerra en Iraq —el tema que definió la presidencia de George W. Bush y cazó a los candidatos de ambos partidos políticos de Estados Unidos en la campaña de 2008— está de vuelta.

Y esta vez vino a causarle dolores de cabeza a Jeb Bush.

En su declaración más clara sobre sus sentimientos acerca de la invasión en Iraq que impulsó su hermano, el exgobernador de Florida dijo este jueves que “sabiendo lo que sabemos ahora… no hubiera impulsado el tema”.

“No hubiera ido a Iraq”, comentó el político republicano.

Los comentarios de Jeb Bush enmarcan la quinta vez esta semana en la que trató de explicar su postura sobre Iraq, una controversia que comenzó el lunes pasado con una expresión de apoyo a la guerra.

Después, Bush trató de limpiar su desorden al decir que su expresión fue “hipotética” y para el miércoles, el político comentó que hubiera hecho las cosas de manera diferente en Iraq.

Este jueves, Bush argumentó que la invasión —que quizás haya sido inspirado por fallas en el servicio de inteligencia— fue benéfica, asegurando que el mundo fue “significativamente más seguro”, sin Saddam Hussein en el poder.

Las respuestas torpes han sorprendido a los aliados de Bush y pudieran reforzar las preocupaciones de que el político, que no ha contendido para un puesto de elección popular en más de una década, es un candidato oxidado que no responde bien a los nuevos ciclos del manejo de campañas en redes sociales.

Este hecho también reveló las dificultades que Bush enfrenta al presentarse como su “propio hombre”, pero bajo la sombra de las decisiones controversiales que tomó su hermano en materia de política exterior.

El tema se ha convertido en una distracción significativa para Bush mientras viaja por la nación, en búsqueda de la candidatura republicana rumbo a la Casa Blanca.

El miércoles por la noche, Bush se encontró defendiendo las políticas de su hermano luego de que una estudiante de universidad lo confrontara en Nevada. “Tu hermano creó ISIS”, le dijo la estudiante durante una discusión sobre la situación actual en Medio Oriente.

El político fue un poco más allá durante un evento político el miércoles, asegurando que “dado que tengo la capacidad de ver hacia atrás, por supuesto que cualquier persona hubiera tomado decisiones diferentes. No podemos negarlo”.

Jeb Bush tampoco dijo que la guerra en Iraq fue un error, argumentando que las preguntas hipotéticas sobre lo que él hubiera hecho con los soldados que sirvieron en el conflicto.

Si bien ha sido una semana difícil para Bush, el regreso al debate sobre Iraq también es un recordatorio de que el tema de la guerra quizás sea un tema más controvertido para la demócrata Hillary Clinton. De todos los candidatos que contemplan aspirar a la presidencia estadounidense, la política es la única que votó para autorizar la acción militar en Iraq.

Algunos electores demócratas aún no le perdonan la decisión a Clinton, que realizó cuando era senadora por Nueva York, y fue un factor significativo para que perdiera contra Barack Obama durante las elecciones primarias del Partido Demócrata en 2008.- (Agencias)