México (14 de febrero).-

Tarde o temprano, todos sufren una decepción amorosa; tal vez la más grande, incluso mayor que la traición, es verse rechazado por la persona añorada desde el comienzo de la “relación” (si es que se le puede llamar así). En nuestra así llamada “posmodernidad”, las redes sociales están inundadas de “memes” que ironizan esa bochornosa situación en la que la persona que nos gusta simplemente nos manda a la “zona de los amigos”, es decir: la “friendzone”.Tarde o temprano, todos sufren una decepción amorosa; tal vez la más grande, incluso mayor que la traición, es verse rechazado por la persona añorada desde el comienzo de la “relación” (si es que se le puede llamar así). En nuestra así llamada “posmodernidad”, las redes sociales están inundadas de “memes” que ironizan esa bochornosa situación en la que la persona que nos gusta simplemente nos manda a la “zona de los amigos”, es decir: la “friendzone”.

Parodiada hasta el cansancio, la friendzone es un lugar temido por todo pretendiente. Cuando alguien cumple con sus expectativas en el rubro amoroso, lo que se busca es que la otra persona nos mire con esos mismos ojos de enamoramiento, pero a veces es imposible concretar que el amado responda recíprocamente. Inevitablemente caemos, entonces, en la zona de los amigos, un lugar incómodo para ambos en esos momentos de transición. Mirado del otro lado, ¿cómo responder la propuesta de una relación amorosa a la que no queremos entrar? Y desde el enamorado, ¿cómo superar los obstáculos, si es que hay manera, para revertir la “amistad” y convertirla en “algo más”?

La sabiduría popular enlista esta serie de recomendaciones habituales y que suelen funcionar (no en todos los casos, pero el intento debe hacerse):

CONSEJOS

1.- SORPRENDE: La rutina es el peor enemigo de toda relación y puede estar presente desde antes de formalizarse, condenándola al fracaso. No hablamos de propuesta de matrimonio en la primera cita, claro: la sorpresa debe demostrar que eres alguien diviertido. Si a quien pretendemos recién lo conocemos, no hay que caer en actividades predecibles.

2.- ENCUENTRA GUSTOS EN COMÚN: Descubre qué le interesa más, sobre todo en el rubro de los hobbies: cine, música, teatro… Quizá el trabajo no le deja tiempo para cultivar esos gustos y necesita un incentivo para reavivar sus intereses: si estás a su lado, tendrás una carta a tu favor.

3.- CONSIGUE UN ALIADO: En otras palabras, consigue una “Celestina”, esto es, entabla amistad con alguien cercano a quien pretendes. Sé claro con las intenciones, para que no exista lugar a malentendidos: hazle saber que te interesa, y con algo de suerte, ese amigo en común puede abogarnos.

4.- CUÍDATE: ¿Hace cuánto que no hacemos una rutina de ejercicio? Independientemente de nuestro estado actual, un nuevo corte de pelo, unos kilos de menos o ponerle mayor cuidado al vestuario pueden ser la diferencia para terminar de convencer a esa persona especial.

5.- NO AGOBIES: Nada puede sabotear más las intenciones amorosas que el hartazgo: dale su espacio, no “stalkees”, tampoco insistas hasta el cansancio (nada de mensajes a deshoras). “Date a desear”, es una vieja recomendación que tiene validez al momento del cortejo.

6.- CONFÍA EN “CUPIDO”: Si te apegas a las actitudes positivas, haces todo tu esfuerzo y sigues los pasos indicados para conquistar a una persona, lo más probable es que sí, la “química” surja y fluya de manera positiva. Si no, ya habrá mejores momentos (y mejores personas) para celebrar un 14 de febrero, por ello, por último:

7.- Si ya lo has intentado un sinfín de veces, si han fracasado todos los intentos de citas románticas, salidas al cine, encuentros en conciertos o paseos por la ciudad, y ni así la otra persona cede un paso en mudarte de la zona de amigos a ese lugar especial, lo mejor para la salud mental es alejarnos de esas intenciones y abrazar con resignación la realidad.