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Mérida, Yuc., México, diciembre 12 de 2017
Universidades de Yucatán, Campeche y Quintana Roo se sumaron a la agenda conjunta que reúne los esfuerzos de las tres entidades, dirigidos hacia la valoración de la biodiversidad y el desarrollo rural sustentable en la región, a través del Acuerdo para la Sustentabilidad de la Península (ASPY).
Como parte de un nuevo capítulo de este convenio, seis instituciones de educación superior de los tres estados firmaron dicho documento, que incluye a la formación como elemento fundamental para el impacto positivo al medio ambiente y la calidad de vida de las nuevas generaciones.
Durante el acto, que encabezó en representación del Gobernador Rolando Zapata Bello el titular de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente (Seduma), Eduardo Batllori Sampedro, signaron la declaratoria las Universidades Autónomas de Yucatán (UADY) y de Campeche (UAC), de Quintana Roo, Marista de Mérida, La Salle de Cancún y el Instituto Campechano.
De esta forma, se comprometieron a promover educación, investigación y formación de políticas e intercambios relacionados con el tema; a generar alianzas con gobiernos, sector privado y organizaciones para realizar proyectos encaminados hacia la participación estudiantil, y a crear programas de capacitación para las matrículas de licenciatura y posgrado, además del cuerpo docente.
Asimismo, a convertirse en ejemplos de responsabilidad ambiental mediante sistemas de administración; a asociarse con colegios de los niveles básico y medio superior para ofrecer adiestramiento sobre cómo actuar ante situaciones relacionadas con el desarrollo sostenible, e incluir una competencia genérica y transversal para todos los perfiles de egreso.
En su mensaje, el funcionario convocó a los representantes académicos, para impulsar voluntades encaminadas a que los estudiantes empleen sus conocimientos y ánimo de cambio hacia una disminución de las problemáticas ambientales que aquejan a la zona, con la finalidad de garantizar un armónico futuro de la sociedad y la Tierra.
“Ante los obstáculos que nos presenta el contexto actual, los jóvenes son lo más preciado y son ellos quienes se convierten en una guía, una luz para un mundo en equilibrio, y es por eso que autoridades, sector privado y educativo vamos a trabajar en coordinación para su cuidado”, señaló acompañado del titular de la Secretaría de Investigación, Innovación y Educación Superior (Siies), Raúl Godoy Montañez.
A un año de la firma del ASPY, Batllori Sampedro destacó que esta iniciativa avanza con miras a un porvenir amigable para la biodiversidad, por lo que se ha encauzado investigaciones y estrategias para la preservación de la selva y la milpa maya, así como de las costas.
El Acuerdo se basa en seis objetivos generales para alcanzar en el 2030, como lograr cero deforestación neta y restablecer dos millones de hectáreas; la intensificación sustentable de la producción agrícola en 250 mil hectáreas y el mismo número en materia ganadera, y la implementación de acciones de reforestación y recuperación en selvas degradadas.
También, asegurar que el 50 por ciento de la extensión terrestre y costera de la Península esté bajo esquemas de conservación y manejo forestal; promover paisajes bioculturales mayas en cinco millones 484 mil hectáreas; atraer recursos de fuentes privadas, equivalentes a la inversión pública dirigida a la economía verde, y restaurar el 20 por ciento de las crestas de arrecifes, junto con el 30 por ciento de playas y dunas costeras alteradas por asentamientos humanos.