A7 no publicó encuestas ni publicó publicidad política en su número especial de Oriente
7 vistazos con binoculares
1. Regreso del garrote.El ambiente represivo ha regresado a Yucatán. La policía detuvo en Tizimín a 8 personas que distribuían A7 en esa localidad del oriente. El semanario A7 publicó un suplemento el martes 29 de julio, dos días antes del silencio electoral. Por su carácter de semanario se distribuye toda la semana. El ejemplar no contenía publicidad política ni encuesta electoral alguna. Sí trae ese número reportajes y editoriales con contenido político como es usual en Artículo 7. Esto no se veía desde épocas de Víctor Cervera Pacheco. El garrote y el uso de la fuerza para reprimir a las voces críticas se está convirtiendo en una cosntante en el Yucatán de Ivonne Ortega Pacheco. La encuesta de la que hablan los acusadores y encarceladores de los distribuidores tizimileños de A7 nunca fue publicada en este semanario. ¿Se seguirán inventando delitos en Yucatán? El sello de Rafael Acosta Solís ¿es el prevaleciente en esta tierra?
2. Sobrina del tío, pintita. Se podrán decir muchas cosas, pero no recordamos que durante el gobierno de Patricio Patrón se reprimiera a alguien como se ha hecho recientemente con Eduardo Chuc Baas, ex alcalde de Dzemul y crítico de la gobernadora. Por si fuera poco, la semana pasada se giró orden de aprehensión contra la esposa y la cuñada de Chuc Baas. No recordamos tampoco que se impidiera la libre circulación de alguna publicación de particulares como es el caso de A7 o bien del PRI o del PRD. Tampoco recordamos que se maltratara a líderes de la oposición: ayer se retuvo por la policía estatal en otro episodio de retenes, a Asís Cano, joven secretario general del Partido Acción Nacional, como si fuese un narcotraficante. El ambiente opresivo, del que Yucatán creyó librarse en 2001, ha retornado. ¿Ante ello, una sociedad muda y medrosa? ¡Dios nos ampare entonces!
3. ¿Rojo amanecer? Las encuestas que se han publicado en Yucatán vaticinan que los 5 distritos electorales de Yucatán amanecerían pintados de rojo el lunes 6 de julio. Regreso de carro completo para el PRI. La pregunta obligada que se hacen los analistas políticos es: si ahorita el gobierno del estado de Yucatán actúa con la impunidad con que lo hace ¿como sería con una mayor prepotencia a partir del día 6? Habríamos regresado a la alineación forzosa de sindicatos, organizaciones sociales y hasta la sumisión que antaño se veía en las organizaciones empresariales.
4. Desigual batalla.En un ambiente cargado de apatía ciudadana y de demolición mediática al PAN —que en este Estado es la única oposición real al gobierno del Estado— los candidatos de la oposición (es decir todos los partidos diferentes al PRI) libraron una batalla descomunalmente desigual. Millones de pesos fluyeron para apoyar a los candidatos tricolores, en particular a Rolando Zapata y a Angélica Araujo. Por si esto no bastara, la gobernadora se placeó en un nunca antes visto despliegue de parcialidad a favor de su partido. Ni la epidemia de influenza la distrajo de sus afanes partidistas. El IFE siempre miró a ver al otro lado, haciéndose de la vista gorda de los múltiples excesos de los candidatos de la gobernadora.
5. Candidata comparsa.La que realizó muy bien el trabajo encomendado fué María Elena Chan, "candidata" del PSD. Ex panista de las huestes de Ana Rosa Payán, "compitió" contra Carolina Cárdenas Sosa en el tercer distrito. La encomienda encargada a la anarrosista fue dedicar toda su batería de invectivas contra la señora Cárdenas Sosa. Igual que Ana Rosa con Xavier Abreu Sierra, María Elena no buscó nunca ganar, sino dañar lo más posible a su ex partido, el PAN. Tuvo profusa publicidad, que no corresponde a la nula presencia del Partido Social Demócrata en Yucatán. Seguramente hubo quien gestionó por y para ella recursos económicos amplios para hacer "el trabajito" sin problemas. La función que realizó Maria Elena Chan recordó las sucias funciones que ejecutaban los partidos comparsa de los tiempos antiguos, los inolvidables solferinos del PPS y el PARM del siglo pasado.
6. PPS, pero de los otros. Hoy PPS ya no significa Partido Popular Socialista, de aquel inolvidable y feíto logo rosado. Hoy son las siglas de los Proyectos de Prestación de Servicios (PPS). Esta semana hubo abundantes desplegados pagados por el PRI con regios dibujitos "made by the style of Gabriela López" la reina de los logos y de los contratos que su despacho Local Consultores le trabaja a la Nueva Mayoría en las más diversas oficinas y secretarías estatales de Yucatán. Con un costo aproximado de 600 mil pesos en desplegados y anuncios, más lo que haya costado la "producción" de los dibujitos. Según el PRI y el gobierno del estado, los PPS serán la llave de la prosperidad y el desarrollo del Estado. Los diputados de oposición no aprobarían estos PPS, en función de que según ellos, en un Estado con los niveles de corrupción como los que ahora hay en Yucatán, solamente se endeudará más el erario público, prestándose para múltiples corruptelas. En estos días se votará en el pleno el Congreso del Estado.
7. Leer, repartir o ver A7 es subversivo. En el Estado de Yucatán, leer, ver, repartir, hojear o abanicarse con sus hojas es subversivo. Repartir un semanario que normalmente se distribuye toda la semana, ahora resulta que es delito y hay 8 encarcelados denunciados ante la FEPADE. ¿Y la libertad de expresión?