MEXICO, D.F., 2 de julio.- Elementos de la Secretaria de Marina y el Ejército mexicano capturaron la noche de ayer martes a José María Chávez Magaña (a) El Pony, jefe del Cártel de La Familia Michoacana, quien era uno de los capos más buscados por las autoridades federales.

El Pony fue detenido en Pénjamo, Guanajuato, y se le considera uno de los últimos jefe de La Familia Michoacana que opera en el Estado de México y la zona limítrofe entre Michoacán y Guerrero.

La detención se da a 24 horas de que elementos del Ejército Mexicano dieron muerte a 22 personas, entre ellos una mujer, que custodiaban una bodega donde eran elaboradas drogas sintéticas, en el municipio de Tlatlaya, en el Estado de México, en la zona de Tierra Caliente que colinda entre Michoacán y Guerrero, a sólo 180 kilómetros de Toluca.

José María Chávez Magaña, un hombre originario del municipio de Tepalcatepec, es identificado como líder de La Familia Michoacana en el Estado de México y a últimas fechas, de acuerdo a informes de inteligencia militar, era perseguido no sólo por las autoridades federales sino también por sus rivales del mundo criminal.

En conferencia, el Comisionado Nacional de Seguridad, Monte Alejandro Rubido, detalló que José María Chávez Magaña fue detenido en Pénjamo, Guanajuato, sin hacer un solo disparo.

Hombre violento, cauteloso y desconfiando, a El Pony se le atribuye la ola de violencia que se desato desde el 2013 en el Estado de México, luego de haber hecho alianza con miembros resentidos o expulsados de Los Caballeros Templarios y Los Pelones, y traicionarlos en algunas operaciones del Estado de Guerrero, que dieron origen a un cártel denominado Guerreros Unidos, que se caracteriza por sus métodos de violencia extrema, ejercida contra sus victimas y rivales.

El Pony se gano la animadversión de propios y extraños cuando quedó a cargo de la plaza de Ecatepec, a raíz de la detención de Martín Rosales Magaña, El Terry, en octubre del 2011, bajo las ordenes de José de Jesús Méndez Vargas, El Chango Méndez.

De acuerdo con la Procuraduría General de Justicia del Estado de México (PGJEM), El Pony es descrito como un personaje sumamente cauteloso que sólo se rodeaba de dos o tres hombres de confianza, y nunca hablaba con sus subalternos de manera directa.

En agosto del año pasado, miembros del Cártel de Los Caballeros Templarios trataron de matarlo en la comunidad de Caja de Agua, en el municipio de Luvianos, pero El Pony escapó ileso, después de un enfrentamiento en el que murieron al menos 30 personas, cifra que nunca confirmaron las autoridades, pero tampoco pudieron precisar.

A ultimas fechas, inteligencia militar lo señala como el responsable de distribuir a gran escala armamento entre las células de sicarios de los cárteles de Los Templarios, Guerreros Unidos y Los Pelones, y de ser el autor intelectual de crímenes masivos como el ocurrido el 12 de agosto del año pasado en el municipio de Tuxpan Michoacán, donde fue masacrada toda una familia, niños incluidos, a manos de sicarios de La Familia Michoacana.

El Pony estaba encargado también de la supervisión de campos de reclutamiento y adiestramiento de jóvenes sicarios, ubicados en el municipio de Luvianos y controlados por Pablo Jaimes Castrejón, alias La Marrana o El Mantecas, y Jesús Salazar Blas, alias El Tuzo, ambos líderes de La Familia Michoacana, que al ser capturados y asesinados en el 2012 y el 2013, dejaron su lugar a El Pony, que quedo como controlador único y máximo líder de este grupo.

A la muerte de El Tuzo, El Pony extendió sus dominios hacia los municipios de Tejupilco, Luvianos, Tlatlaya y prácticamente todo el Sur del Estado de México, por lo que se le pudo vincular con ejecuciones que ocurrieron en el Valle de Toluca y parte de Michoacán.

Por el momento las autoridades que participaron en la captura de El Pony ya ofrecieron detalles sobre la captura del narcotraficante. Fue capturado con vida junto con otros dos de sus hombres cercanos. (El Universal)