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México (15 de octubre).-
Las unidades médicas del IMSS en Ciudad Juárez registran desde la semana pasada una mayor demanda de atención por padecimientos respiratorios, por lo que se intensificó el llamado a extremar las medidas de prevención.
El supervisor de Epidemiología en la Zona Juárez del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Oscar Rafael Contreras López, dijo que sólo la semana pasada fueron atendidos un total de mil 50 casos de infecciones respiratorias agudas.
Esas atenciones en las Unidades de Medicina Familiar y los hospitales del IMSS en esta ciudad, expuso, significaron un incremento de 20 por ciento de casos en relación a la semana anterior cuando se registraron 860 personas.
Los cambios de temperatura debido a la entrada del otoño, la humedad que prevalece en la región, así como periodos frescos sobre todo en la noche son factores que inciden en la prevalencia de malestares respiratorios que incluyen los de origen alergénico.
El especialista del IMSS indicó que entre las medidas de prevención está evitar los cambios bruscos de temperatura.
“La gente se confía y no se refuerza con una prenda extra al ser sorprendida por una baja en el clima, lo que ocasiona una baja en las defensas del organismo y permite la entrada de los virus”, señaló.
Las personas que se saben alérgicas deben evitar exponerse a estos cambios de temperatura, a la maleza, a los polvos y otros elementos que provocan exacerbación de sus molestias.
Subrayó la importancia de evitar la automedicación, “pues sólo provoca que se oculte el origen de la enfermedad y esta se agrave”.
Sostuvo que el profesional de la medicina es quien tiene los conocimientos para diagnosticar el tipo de infección y prescribir los medicamentos de manera adecuada.
Contreras López anotó que las enfermedades respiratorias más frecuentes que se presentan son la rinitis (reacción inflamatoria en el tejido que recubre la nariz por dentro) y el asma bronquial (enfermedad inflamatoria de la mucosa bronquial).
Ambas, apuntó, responden a estímulos negativos como el frío, la humedad, el polvo de la casa, contaminación ambiental, pelos de animales (perros, gatos), polen y olores fuertes de algunos productos químicos.
La rinitis puede derivar en una otitis y sinusitis. El asma, por su parte, si se complica por agentes infecciosos desarrollará bronconeumonía o neumonía con peligrosas consecuencias para el paciente.
Las crisis asmáticas se manifiestan con tos, silbidos en el pecho, secreciones o flemas y fatiga, que de no ser atendidas oportunamente pueden derivar en otros síntomas como obstrucción del pecho, sensación de falta de aire y tos persistente.
En cuanto a la rinitis alérgica suele confundirse con un resfriado común por la presencia de flujo nasal transparente, estornudos frecuentes y dolor de cabeza, de ahí la importancia de acudir a una valoración médica.
Aconsejó a la población y sobre todo a las personas que sufren alergias a que incrementen el consumo de frutas y verduras ricas en vitamina C, abrigarse por las mañanas y noches que es cuando el clima es más fresco.
Además no exponerse a los elementos que provocan irritación como son la maleza, el polen y los vientos que arrastran gérmenes.
El IMSS exhortó a la gente para que ante cualquier sospecha de una enfermedad alérgica acuda a su Unidad de Medicina Familiar, para ser valora y reciba el tratamiento correspondiente.