México (15 de octubre).-

De acuerdo con la FAO, la proteína animal que más se consume en el mundo es el pescado, con 17 kilos por persona al año, seguida de cerdo, el pollo, res y pequeños rumiantes. Sin embargo, y a pesar de sus amplios litorales, en México la proteína que más se consume es de pollo, después la de res, cerdo y al final el pescado.

“La gente buscaba que el animal se matara y en ese momento se consumiera, por eso es tan alto el consumo de pollo: la gente lo mataba en su casa y se lo comía. Nos quedamos con la cultura de que por eso, el pollo es una carne más fresca.” explicó el experto Diego Braña.

“Las proteínas necesitan refrigeración, por eso no deberíamos comprarlas y mucho menos comerlas en la calle. Hay estudios que comparan la contaminación que existe en establecimientos donde hay cuatro paredes, tres o ninguna. Hoy en día tenemos cadenas de frío eficientes, que permiten asegurar que estás comiendo proteína fresca y refrigerada correctamente” añade la especialista María Salud Rubio.

En México existen dos sistemas sanitarios diferentes legales, uno regulado por SAGARPA y otro por la Secretaría de Salud. En el primero, la engorda de animales como la res y el cerdo suele ser en corral, la sanidad está regulada por el sistema TIF y la venta generalmente llega a los supermercados; en la segunda la engorda suele ser en pastoreo, no hay sistema TIF y la venta generalmente llega a las carnicerías.

“Lo interesante es cómo consumimos y percibimos las proteínas. Mucha gente percibe el pollo como algo saludable. Incluso cuando nos enfermamos, solemos comer caldo de pollo, cuando podría ser mejor opción un caldo de pescado, ya que la proteína es mucho más fácil de digerir” comentó Salud.

Por último está el precio: aparentemente el pollo es una proteína más barata en comparación con otras. La proteína más cara es la de res, luego cerdo y al final pollo. El pescado varía mucho dependiendo del tipo y si lo compras en las costas, es más barato. Hay pescados más caros que un corte de res o más baratos que el pollo. También influye si es pescado es de granja o de mar.

“Solemos relacionar el consumo de la proteína con el nivel socio económico. Generalmente la carne de res la percibe el mexicano con poder adquisitivo. La de cerdo la gente la relaciona con fiestas. Es la celebración, al mexicano le encanta la carne de cerdo, el problema es que lo hemos asociado con placer y eso para muchas personas es malo, si comes mucho cerdo te sientes pecador” explicó Braña.

La controversia a futuro Actualmente ya hay más de 7 mil 400 millones de personas en el mundo. La proyección para el 2050 es de 9 mil 800 millones de personas, por lo que el aumento de la demanda de la proteína crecerá en un 60 por ciento. El problema radica en generar más proteína con la misma tierra y agua, para abastecer la demanda. Se espera que con ayuda de los avances tecnológicos y científicos, se resuelva este tema.

¿Sabías qué? México es el octavo productor de carne a nivel mundial.

Entre el 8 y el 10 por ciento de la proteína nacional se exporta a Japón, convirtiendo a México en el principal exportador de cerdo al país asiático con 80 mil toneladas al año.

Existen certificaciones de bienestar animal como la NOM 033 donde se estipula que el aturdimiento es obligatorio antes de la matanza.

La vitamina B12 es un nutriente esencial que sólo se puede obtener a través de las proteínas animales, es por eso que vegetarianos y veganos deben consumir suplementos de esta vitamina.