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Moscú (1 de agosto).- Rebeldes separatistas en el este de Ucrania emboscaron una columna de tropas del ejército, con un saldo preliminar de al menos 10 soldados y cuatro hombres no identificados muertos, cerca de donde se estrelló el vuelo MH17.
Un portavoz militar ucraniano confirmó 10 muertes, pero medios de comunicación locales estiman que hasta 20 militares fueron abatidos en el ataque en Donestk, región tomada por los separatistas prorrusos.
Las fuerzas enemigas emboscaron a nuestras tropas en Shakhtarsk, aprovechando la topografía”, señaló Vladyslav Seleznyov, portavoz de “operación antiterrorista” de Ucrania, a la estación de televisión ICTV.
Los rebeldes sostienen que destruyeron más de 30 vehículos, mientras que un video distribuido por los separatistas a través de los canales habituales, pero que no ha sido verificado por una fuente independiente, muestra cuerpos en torno a un vehículo en llamas.
Una fuente militar ucraniana señaló que en total se sabe que 14 personas murieron, pero los cuerpos de cuatro de ellos no se han identificado y podrían ser soldados o terroristas, tras el choque, en la localidad de Shakhtarsk a 25 kilómetros del sitio de la caída de avión.
El combate rompió una breve tregua en toda la región devastada por la guerra, mientras expertos internacionales se dirigieron al lugar donde se hallan los restos del avión derribado para tratar de comenzar una investigación, reportó el diario Kyiv Post.
El ejército ucraniano advirtió que estaba relanzando una ofensiva contra los combatientes separatistas tras el alto el fuego de un día, pero insistió que sus tropas no llevarán a cabo operaciones en las inmediaciones del lugar del accidente.
Los militares anunciaron este viernes que habían logrado avances en Novyi Svit, a unos 25 kilómetros al sureste del bastión rebelde de Donetsk, y siguen los combates para asegurar la volátil frontera con Rusia.
Los equipos forenses holandeses y australianos han regresado al lugar donde se estrelló el vuelo MH17 después de su primera visita el jueves.
Como parte de un convoy con la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), los monitores, más de 60 expertos, llegaron al lugar este viernes.
Los combates en la región habían impedido anteriormente llegar a la zona donde cayeron los restos del avión de Malaysia Airlines, derribado el 17 de julio con la pérdida de los 298 pasajeros y tripulantes.
Australia cree que alrededor de 80 cuerpos permanecen en el lugar del siniestro, controlado por los rebeldes, más de cien cadáveres han sido repatriados a Holanda, de donde eran la mayoría de los pasajeros muertos.- (Excélsior)