MEXICO, D.F., 7 de noviembre.- La Procuraduría General de la República (PGR) informó que al menos 15 de los 43 normalistas de Ayotzinapa, desaparecidos en Iguala, Guerrero, el pasado 26 de septiembre habrían muerto por asfixia y el resto asesinados a manos del grupo criminal Guerreros Unidos.

A todos, según revelaron tres detenidos, les prendieron fuego en el tiradero de basura de Cocula y, posteriormente, sus cenizas esparcidas en el río San Juan.

Jesús Murillo Karam, titular de la PGR.

A los normalistas les prendieron fuego.

En conferencia de prensa, el Procurador General de la República, Jesús Murillo Karam, admitió que desde hace 33 días, cuando asumió el caso de la desaparición de los 43 normalistas en Iguala, los días 26 y 27 de septiembre, la investigación ha sido difícil.

Durante este tiempo, expresó el Procurador, no se ha dejado de buscar a los desaparecidos. "También han sido 43 días que los mexicanos hemos vivido la angustia, la indignación de la desaparición de 43 estudiantes con quienes nos hemos solidarizado todos".

Indicó que han participado en la ubicación de los jóvenes 10 mil elementos de distintas corporaciones como la misma PGR y las secretarías de Marina, de la Defensa Nacional y Policía Federal, logrando la detención de quienes privaron de la vida a seis personas en Iguala esa noche, así como quienes secuestraron y entregaron a los jóvenes.

El Procurador hizo un recuento de los acontecimientos y los resultados que han arrojado las pesquisas.

Los tres detenidos y ejecutores

Entre las novedades, la PGR informó la detención de Patricio Reyes Landa, alias El Pato, y Jonathan Osorio Gómez, alias El Jona, aprehendidos en Cuetzala, Guerrero.

Estos dos sujetos condujeron a localizar, en Cocula, a Agustín García Reyes, todos son integrantes del grupo delincuencial Guerreros Unidos, que presuntamente se llevó a los normalistas.

Los tres confesaron a las autoridades haber recibido y ejecutado a jóvenes de Ayotzinapa.

Aclaró que sólo presentaría avances de la investigación, pero "no son ni pretenden ser las conclusiones de la misma. La investigación continúa su curso".

Presentó un mapa en el que se indica que los normalistas a bordo de camiones de la empresa Estrella de Oro, la tarde de ese 26 de septiembre de Ayotzinapa, se dirigieron con rumbo a Iguala, después fueron a la terminal de autobuses donde tomaron otras dos unidades

José Luis Abarca, entonces Alcalde Iguala, fue quien dio la orden a la Policía Municipal de contener a las personas que viajaban en esos cuatro camiones, señaló Murillo Karam. En ese momento fueron asesinados tres de los normalistas.

Con violencia decenas de sus compañeros fueron detenidos por policías municipales y trasladados en patrullas hasta un punto entre Iguala y Cocula hasta la zona de una brecha conocida como "Loma de Coyote". También se acreditó que, en ese punto, los uniformados entregaron a los retenidos a los criminales de Guerreros Unidos.

Algunos señalamientos aseguraban que los jóvenes habían sido enviados a Pueblo Viejo, donde estaban las fosas, pero los estudios desecharon esta hipótesis, ya que se identificó a cuatro personas que fueron asesinadas en agosto y se encontraron restos de mujeres, pero los normalistas eran sólo varones.

Murillo Karam indicó que Sidronio Casarrubias Salgado, líder de Guerreros Unidos, fue contactado por su lugarteniente Gildardo López Astudillo, conocido como El Gil, quien le informó los conflictos atribuyéndoselos a Los Rojos.

Patricio Reyes Landa, alias El Pato y Jonathan Osorio Gómez, alias El Jona, así como Agustín García Reyes, fueron señalados por el Procurador como los autores materiales, quienes declararon que "en la brecha que lleva al paraje Loma de Coyote recibieron a un número de personas que no pueden precisar con exactitud pero que uno de los detenidos estimó en más de 40 personas…".

Quien los recibió

Así se presentó el vídeo donde se escucha: "Dicen que eran 44. Yo pienso que los contaron", dijo el presunto delincuente e indicó que fue El Pato quien los entregó. Prosiguió el Procurador indicando que los detenidos dijeron que tomaron la carretera a Cocula para dirigirse al basurero municipal.

Los normalistas fueron subidos a un camión de 3.5 toneladas y a otra camioneta de carga menor. En esos vehículos los llevaron a un barranco, al que se ingresa sólo abriendo una reja.

Uno de los testigos indicó que las personas trasladadas llegaron al basurero "o sin vida o inconscientes y los otros fueron interrogados por integrantes del grupo criminal para determinar quiénes eran y las razones de su llegada a Iguala".

Uno de los detenidos fue cuestionado si había algunos muertos al momento de llegar al tiradero, quien respondió que había unos 15 fallecidos por asfixia. Los sobrevivientes, describió, fueron interrogados sus nombres.

Los incineraron durante 15 horas

Los detenidos señalaron que en ese lugar privaron de la vida a los sobrevivientes y, posteriormente, los arrojaron a la parte baja de los basureros donde quemaron los cuerpos. "Hicieron guardias y relevos para asegurar que el fuego durara horas. Arrojándoles diesel, gasolina, llantas, plásticos entre otros elementos que encontraron".

El fuego duró de la media noche del 26 de septiembre hasta las 14 horas del sábado 27 y otro sujeto declaró que acabó a las 15 horas. Por el calor que desprendía el lugar, no pudieron manipular los cuerpos sino hasta las 17:30 horas, aproximadamente.

Los peritos encontraron fragmentos que corresponden a cuerpos humanos.

Agustín García, alias El Chereje, confesó que los tomaban de los pies y manos para lanzar los cuerpos sin vida al barranco. Los hechos fueron confirmados por dos encargados del área de servicios públicos de Cocula, quienes viajaban a bordo del camión con número 01 y fueron interceptados por dos de los detenidos, quienes les impidieron el paso y les ordenaron que se retiraran.

Los detenidos confesaron que cuando bajaron al lugar donde yacían los cuerpos, otro sujeto de apodo El Terco les ordenó fracturar los restos óseos calcinados para ser depositados en bolsas negras, que fueron vaciados en el Río San Juan, salvo dos que uno de los detenidos dijo que las echó completas.

Uno de los testigos explicó que El Duva y El Huasaca llevaron la gasolina y rosearon a los jóvenes.

Los peritos recorrieron el Río San Juan, donde recordó que falleció un elemento de la Policía Federal. Ahí encontraron dos bolsas. Una de ellas permanecía cerrada y, en su interior, hallaron restos humanos.

Difícil extraer ADN de los restos

Debido al alto nivel de degradación causado por el fuego a los cuerpos encontrados, "hace muy difícil la extracción de ADN que permita la identificación."

Murillo Karam anunció que los peritos determinaron que el mejor lugar para realizar los estudios mitocondriales en la Universidad de Innsbruck, en Austria. Adelantó que debido a lo complejo del estado en que se encuentran los cuerpos "no se puede especificar una fecha definida para la entrega de los resultados."

Entre otros hallazgos, Murillo Karam expresó que en la búsqueda fueron decomisadas armas de grueso calibre.

El Procurador, durante la conferencia, aclaró que no existía evidencia que los jóvenes formaran parte o auxiliaran "a grupo criminal alguno." Contabilizó 74 detenidos por estos hechos y están por cumplimentarse 10 órdenes más.

La investigación continuará abierta, hasta que se logre identificar los restos hallados en la barranca y el río. "La investigación queda abierta hasta agotar todas las posibilidades que permitan identificar los restos humanos encontrados en la barranca y en la bolsas del Río San Juan. Mientras tanto se seguirán considerando como desaparecidos los normalistas de Ayotzinapa".(Radio Fórmula)