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México (16 de diciembre).-
El experto del Centro de Investigación Biomédica (CIBO) del IMSS en Jalisco, Alberto Villaseñor Sierra, destacó la importancia de mantener hábitos alimenticios saludables en el control de enfermedades como la diabetes.
“Tenemos que cambiar nuestra lógica de dejar de comer de manera ansiosa y provocativa por el gusto de comer y hacerlo por salud, por necesidad, si aceptamos el reto estamos del otro lado”, afirmó el investigador de la División de Inmunología del CIBO.
Explicó que la diabetes es una enfermedad sistémica multifuncional y poligenética que se caracteriza por tener exceso de azúcar o glucosa en sangre y/ o generar resistencia a la insulina, debido a un mal funcionamiento del páncreas lo que origina una secreción inadecuada o excesiva de la hormona glucagón.
Villaseñor Sierra refirió que de acuerdo a estudios del Centro de Control Estadunidense, hasta un 40 por ciento de la población mundial tiene la enfermedad, en tanto que la Federación Internacional de Diabetes contabiliza aproximadamente 366 millones de personas a nivel mundial, afectadas con la patología.
El experto indicó que, de acuerdo a la Encuesta de Salud del 2012, en México hay un registro de 6.4 millones de personas diabéticas en el país y conforme a estimaciones del Banco Mundial el costo de la atención de esta enfermedad asciende a cerca de cuatro mil millones de pesos anuales.
Aseguró que a través de una alimentación basada en alto consumo de fibra, granos enteros, frutas y verduras y proteínas de origen no animal, como la llamada dieta macrobiótica, es posible controlar la diabetes, disminuir la necesidad de insulina, reducir niveles de colesterol y triglicéridos y bajar de peso en tan sólo 21 días.
Sobre la dieta macrobiótica, dijo que este tipo de alimentación fue establecida por Roy Littlesun integrante de una comunidad indígena de Norteamérica en Arizona quien logró curarse de tuberculosis sin el suministro de medicamentos en pocas semanas, enfermedad que había matado a sus familiares.
Villaseñor Sierra detalló que la teoría de este tipo de dieta se basa en el equilibrio de los alimentos y en la inclusión de la sal de mar en lugar de la sal procesada.
Resaltó que el término macrobiótica tiene una connotación en la cultura de Littlesun la cual se avoca al “arte de vivir muchos años”.
En este régimen, estableció, se prioriza el consumo diario de cereales, legumbres y granos enteros, además del aceite de olivo, en tanto se establece con una frecuencia mensual y opcional la ingesta de carne, pollo, huevo y lácteos, anteponiendo la ingesta de pescado.