353 palabras
México (17 de enero).-
Evita que tu incursión en el mercado de las rentas se convierta en una pesadilla.
Para reducir el riesgo de incumplimiento, mejor exígele a tu futuro inquilino un aval solidario, recomienda Emma de Saldaña, de Asin Bienes Raíces.
Él será el responsable de cubrir el alquiler en caso de que se presente algún retraso.
Desde la perspectiva del inquilino, conseguir un fiador suele ser una tarea compleja. “Pocos están dispuestos a comprometerse por otra persona.
“Pero hoy no se les está rentando a quienes no cumplen con este requisito”, sostiene.
A fin de librar esta renuencia, es importante explicarle al posible garante qué implica participar en la operación de arrendamiento.
“Aunque se pide que el fiador cuente con una propiedad, no significa que ésta se les va a gravar”, expone.
Incluso es factible establecer un monto máximo al compromiso de pago del fiador en caso de que el inquilino incumpla.
Investigar exhaustivamente al prospecto de inquilino es otra de las claves para prevenir dolores de cabeza en el futuro.
“Esta parte del proceso es importante para saber a qué se dedican y qué tan serios son”, apunta.
Ello incrementa la posibilidad de que los recursos con los que planee pagar el alquiler sean de procedencia lícita.
De lo contrario, hasta puedes llegar a perder tu propiedad por efectos de la denominada Ley de Extinción de Dominio.
“El costo de la investigación, que es realizado por empresas especializadas, tiene que ser cubierto por los que desean rentar”, señala.
En los arrendamientos, los conflictos más comunes son los recibos de servicios no pagados o desperfectos en el mobiliario o en la construcción misma.
“Normalmente eso lo cubre el depósito en renta.
“Pero si no alcanza para arreglarlo ahí entra el fiador a pagar la diferencia”, explica.