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México (26 de septiembre).-
En un documento dirigido al Juez Tercero de Distrito del Estado de México, con residencia en Toluca, se informó que se aplicó un peritaje a Joaquín “El Chapo” Guzmán para desahogar la prueba de medicina basada en el Protocolo de Estambul, sobre actos de tortura en su contra.
Firmado del puño y letra del capo, este protocolo ingresó a juzgado a principios de septiembre donde fundamentalmente dice ha presentado en este momento signos físicos y síntomas de que fue y está siendo sometido a malos tratos en su estancia carcelaria y se denotan por la presencia de un trastorno de ansiedad generalizada y un trastorno neurocognitivo leve.
Dichos trastornos se han controlado de manera parcial con la administración de un medicamento, un ansiolítico, sin embargo no se recomienda su uso prolongado, además de que se sugiere que sea atendido por el servicio de psicología y psiquiatría para el control del trastorno que padece.