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1. Música de Paganini. Varios meses han pasado desde que Artículo 7 publicó —con documentos oficiales probatorios— que el diario Por Esto! recibió delictuosos pagos de más de 2 millones de pesos mensuales que le fueron obsequiados generosamente por el
Gobierno del Estado de Yucatán. Al menos en los 11 meses revisados por A7, se probó que al periódico que dirige Mario Renato Menéndez Rodríguez le fueron ofrendados 24 millones de pesos de los impuestos que pagamos todos. Se le pagó con tu dinero amigo lector, el concepto fue "publicidad y cobertura periodística". El gobierno no ha acreditado hasta ahora ninguna publicidad o bien cuál fue la cobertura noticiosa que se pagó tan generosamente al periódico de la "Dignidad, Soberanía e Identidad". la respuesta ha sido el silencio gubernamental. Los paganinis somos todos. ¿Qué opinarán las empresas y cientos de proveedores del gobierno yucateco a quienes hasta la fecha no les pagan adeudos pendientes?
2. Sordos y mudos. Lo sorprendente del asunto es que nadie ha tomado acción al respecto. A los diputados del PAN no les interesa. Deben estar muy ocupados en sus iniciativas. A la diputada del PRD, tampoco. A la "anarrosista" Doris Candila no le quita un minuto de sueño. Y por supuesto, este tema, para las huestes del PRI ¡no existe! Seguro que A7 está entre las lecturas prohibidas para los legisladores comandados por su pastor Berlín Montero. Los tres diputados federales del PAN andarán averiguando por qué a ellos no les tocaron camionetas. El tema que nos ocupa tiene más materia para la Auditoría Superior de la Federación que el de las camionetas. Pero no, no les interesa.
3. Calma chicha. Que el dinero de todos se use para pagar un trabajo inexistente, es decir se le regale a manos llenas a alguien que no hizo el trabajo que se dice se hizo, y por el cual se emiten facturas muy bien pagadas por el gobierno de Ivonne Ortega no es asunto relevante para algún representante popular de los yucatecos. ¿Y la "Sociedad Civil"? Pues parece que también duerme en el sueño de los justos. Sí, muy justitos y muy indolentes sus representantes. Calma chicha. Chicha la calma de una comunidad anestesiada. Mucho revuelo por el programa "Tócate", pero hay temas que no se tocan, ni se hablan, ni se escriben.
4. Chicharrones. Hablando de chichas, chuchús y jugosas ordeñas, igual o peorcito se ve el mayúsculo engaño de los números que aparecen en el cheque de la gobernadora. Con la cantaleta de campaña de que los funcionarios públicos del gobierno estatal anterior percibían "sueldos estratosféricos", durante su primerísimo acto de gobierno —en la glomorosa toma de posesión— Ivonne Ortega Pacheco anunció la emisión de un decreto que ordenaba descontarle la mitad de su sueldo, para transferirlo a un programa de becas denominado "Compartir" destinado a estudiantes aventajados. También un segundo decreto, el que creó formalmente ese programa junto con sus reglas de operación, ordena a la Tesorería descontar la mitad del sueldo de la titular del ejecutivo, para depositar dicha cantidad a la cuenta de "Compartir". Ni la gobernadora, ni la Tesorería, ni la Oficialía Mayor (que maneja la nómina de los empleados gubernamentales) ha hecho tal descuento. Así consta en el cheque oficial que A7 ha exhibido una y otra vez.
5. El talón de cheque, ¿talón de Aquiles? Las copias de los cheques de la señora gobernadora, obtenidos a través de la unidad gubernamental de acceso a la información muestran inequívocamente que ésta ha cobrado íntegramente su cheque desde que inició su gestión hasta la fecha. O sea, que no se le ha descontado como lo ordenan los dos decretos emitidos por la mismísima gobernadora, un solo centavo de su cheque. Se podrá alegar que —a lo mejor— una vez cobrado su sueldo, la gobernadora le podría entregar a "Compartir" la mitad de su salario como se ha cacareado durante medio quinquenio. Pero ello sí cae en el terreno de la suposición. Tendría que probar documentalmente la titular del ejecutivo yucateco con las fichas de depósito al programa compartir que efectivamente ha hecho tales depósitos, ya que no le han sido descontados. La violación a la Ley es manifiesta y evidente: los dos decretos hablan de que el descuento tendría que haberse hecho a los cheques de la gobernadora. Nunca se hizo. Eso sí está probado. La burla a lo ordenado por el decreto es absoluta, contundente, incontrovertible. ¿Cuestionará Ana Rosa Payán Cervera a su amiga y aliada Ivonne sobre estos temas? ¿A la señorita Payán —autonombrada adalid de la tranparencia— le interesará inquirir desde el INAIP sobre el donativo nunca descontado a la gobernadora de su cheque?
6. Mío, mío y solamente mío. Tres semanas han pasado desde que A7 dió a conocer que, según la evidencia presentada, Ivonne Ortega Pacheco no comparte con "Compartir". Ningún otro medio de comunicación yucateco ha hablado o escrito una sóla palabra sobre el asuntillo. Sólo uno de los líderes de la agrupación "Sociedad en Movimiento", el señor Luis Medina Cantillo ha tocado el asunto y exigido explicaciones al gobierno del estado. En Palacio, silencio. En las cámaras empresariales, silencio. Muy a tono con las fiestas de Hanal Pixán, silencio de cementerio. Al parecer nuestros representantes populares locales y federales de todos los partidos otra vez piensan que calladitos se ven más bonitos. Bonita costumbre. Ahora que está otra vez de moda don Emilio Carlos, acatan muy bien la célebre frase que llevó al estrellato a nuestro arzobispo durante la era "cerveriana". ¿Se acuerdan ustedes de aquella joya declarativa: "estos son tiempos de callar"? Pues nuestros diputados locales y federales, nuestros empresarios, académicos, colegios de abogados y profesionistas, y con ellos la abrumadora mayoría de los medios de comunicación yucatecos han de ser muy obedientes lectores del posmodernista Evangelio según Emilio Carlos.
7. Antro. Al Campanario han llegado muchas quejas del antro que se está construyendo en la Avenida "Cámara de Comercio" (antes denominada "Villas la Hacienda") sin autorización del Ayuntamiento de Mérida. Hay gran malestar entre los vecinos ya que la Secretaría de Seguridad Pública, comandada por Luis Felipe Saidén, se ha negado a proporcionar la fuerza pública solicitada en múltiples ocasiones por el Ayuntamiento para hacer valer el freno a la obra clausurada, pero que validos de influencias en la SPV, sus dueños han reanudado la construcción en una zona en donde el uso del suelo no lo permite. Los vecinos acusan a Saidén de ser cómplice de los mafiosos, ya que los dueños de la plaza comercial y del futuro antro son Jorge Sosa Chacón (mejor conocido como el "Huiro Sosa") y Miguel Zaldívar son conocidos por pertenecer a la mafia yucateca. El "Huiro Sosa" posee un banco de bolita que al día de hoy se disputa la supremacía de la plaza con el banco de bolitero del difunto Nico Xacur, esposo de la hoy reina en Yucatán de las hamburguesas Gaby Cejudo Valencia. Miguel Zaldívar es capo en el lucrativo negocio de la piratería de discos, películas y juegos de vídeo. De lo anterior, no es difícil deducir el motivo por el que Saidén Ojeda no quiera cumplir con la ley y proporcionar la fuerza pública. Sería cortar la cabeza de dos grandes financiadores y colaboradores de campañas pasadas a diputaciones federales y de sus futuros mecenas de la campaña que se avecina en mayo de 2010.