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EE.UU (24 de enero).- Emily Nappi y Mikayla Stern-Ellis, se conocieron en la Universidad de Tulane, en Nueva Orleans. Ambas cursaban el primer año y nunca imaginaron lo que descubrirían.
A medida que su amistad fue creciendo y sus gustos compartidos eran evidentes, ambas bromeaban sobre si no serían “hermanas separadas hace mucho tiempo”. No solo tenían similitud en la apariencia, los gustos por el teatro e incluso vestimenta las sorprendía, en una ocasión se dieron cuenta que ambas habían comprado el mismo modelo de chaqueta.
Las dos jóvenes sabían que eran hijas de un donante anónimo colombiano y esto, según Emily les daba un 25% de probabilidad de que su broma de ser hermanas sea real.
Tantas eran las coincidencias que los padres de Mikayla realizaron las investigaciones y demostraron que ambas fueron engendradas con esperma del mismo donante.
El perfil de Facebook de las ‘nuevas hermanas’ tiene un proverbio chino que describe su historia a la perfección: “Un hilo invisible conecta a aquellos que están destinados a encontrarse, sin importar el tiempo, el lugar ni la circunstancia. El hilo se puede estirar o enredar, pero nunca se romperá.” .- (El Comercio)