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México (12 de febrero).-
El Papa Francisco llega hoy a México, un país que goza de liderazgo en turismo religioso, pero al que le hace falta que sus autoridades comprendan cómo capitalizar algo que en México se da casi de manera natural.
En México, casi 90 por ciento de la población profesa el catolicismo y existe una marcada tendencia a peregrinar hacia sus distintos santuarios, de tal forma que cada año unas 40 millones de personas se desplazan en el interior sólo por motivación religiosa, lo que genera un impacto económico no cuantificado por la Secretaría de Turismo (Sectur) en los últimos 7 años.
De acuerdo con el documento “Etapas del ciclo de vida en el desarrollo del turismo religioso: una comparación de estudios de caso 2015”, en el Estado de Jalisco, por ejemplo, el turismo religioso tiene un gran potencial, ya que tan sólo a San Juan de los Lagos, el segundo centro religioso más importante de México, llegan unos 6 millones de peregrinos, que generan un impacto económico de más de 41 millones de euros.
Sin embargo, hasta ahora las autoridades jaliscienses, tanto laicas como eclesiásticas, apenas lo han promovido, por lo que actualmente diversas instancias estatales y municipales están tratando de impulsarlo.
Alejandro Moreno, ex subsecretario de Turismo, explicó que en México las autoridades no han identificado este nicho de negocio, ni comprendido cómo capitalizar este segmento de turismo.
“Lo que ha sucedido en el caso del turismo religioso es que hay poca comprensión desde las instituciones para encontrar la manera de capitalizar de manera más adecuada, lo que se da de manera natural.
“El tema del turismo religioso es un tema de desarrollo de producto a partir de identificar el mercado adecuado para que tengamos un tiro más certero al hacer las promociones; yo creo que hay un nicho de mercado que hay que identificar, en principio, que anda buscando experiencias religiosas, y si no somos capaces de empaquetar las emociones, nos va a costar mucho trabajo vender el turismo religioso”, señaló.
Destacó que la primera oportunidad que se tiene como país para capitalizar la visita del Papa Francisco, es mostrar un México listo, es decir, un México que tiene la capacidad de atender una visita de este tamaño.
Jorge Hernández, presidente de la Confederación de Organizaciones Turísticas de América Latina (Cotal), coincidió en que el turismo religioso se da en México de manera casi automática, pero es urgente que las autoridades lancen campañas para promoverlo y aprovecharlo mejor.