*México (4 de abril).-

Las casas de empeño operan con criterios contrarios a los mitos que existen sobre el sector.

Rafael Mondragón, presidente de la Asociación Mexicana de Empresas de Servicios Prendarios (Amespre), dijo que uno de los principales mitos es que estas empresas prestan muy poco respecto al valor de las prendas que los usuarios dan como garantía.

Sin embargo, el empresario indicó que las casas incoporporadas a Amespre prestan 71.2 por ciento del valor comercial de las prendas conforme a catálogos de precios públicos como el “kitco” que se usa para metales y el “libro azul” que se utiliza para vehículos.

Señaló que otro mito es que la mayoría de las personas que empeñan es que pierden su prenda.

“El 76 por ciento de los usuarios la recupera, ya que hay casas que les dan facilidades para ello”, indicó.

El tercer mito, indicó Mondragón, es pensar que las casas de empeño no están reguladas, pues cumplen con diversas disposiciones de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) y de la Secretaría de Economía.

Además, son sujetos obligados a reportar de acuerdo con la ley antilavado y deben cumplir con regulaciones impuestas por las procuradurías de justicia de los estados en los que operan.

Fuentes de la Amespre comentaron que hay la intención de comenzar a diseñar una regulación federal que haga eficiente la operación del sector.

Este organismo representa a las 18 casas de empeño más grandes del País, y que forman parte de un mercado constituido por 454 marcas con una red de 5 mil 980 sucursales.