205 palabras
México (29 de mayo).- Los padres de familia juegan un papel fundamental en el combate al bullying.
Pláticas cotidianas y aparentemente banales suelen ser útiles para detectar si un niño está siendo acosado en el entorno escolar o si, por el contrario, está agrediendo a sus pares.
Te presentamos algunos tips.
Los niños acuden a sus padres y cuidadores para obtener consejos y ayuda antes de tomar decisiones difíciles.
En ocasiones, pasar 15 minutos al día hablando puede demostrarle a los niños que pueden hablar con sus padres si tienen algún problema.
Inicie conversaciones sobre los sentimientos y la vida cotidiana con preguntas como estas:
¿Qué pasó de bueno hoy? ¿Sucedió algo malo?
¿Cómo es la hora del almuerzo en tu escuela? ¿Con quién se sienta? ¿De qué hablas con tus compañeros?
¿Cómo es viajar en el autobús escolar?
¿En qué se destaca? ¿Qué es lo que más le gusta de sí mismo?
Cualquier respuesta que revele incomodidad del niño debe ser tomada en cuenta para identificar posibles agresiones.- (Excélsior)