México (13 de marzo).- El fundador de WikiLeaks, Julian Assange, está dispuesto a ser interrogado en Londres por la Fiscalía sueca en el caso abierto por cuatro presuntos delitos sexuales, por los que fue dictada prisión preventiva en ausencia en Suecia en 2010.

“Está feliz por la decisión, quiere ser interrogado y limpiar su nombre para que su vida continúe”, dijo hoy a la emisora pública “Radio de Suecia” Per E Samuelsson, uno de sus abogados suecos.

La Fiscalía sueca anunció hoy que ha enviado una solicitud a los abogados de Assange para que el interrogatorio se realice en la Embajada de Ecuador en Londres, donde lleva refugiado desde 2012, una medida que la defensa del periodista australiano reclamaba desde hace años y por la que había recurrido a los tribunales.

El motivo del cambio de decisión de la Fiscalía, que hasta ahora se había negado a viajar a Londres apelando a la gravedad de los hechos y a la legislación sueca, es que varios de los delitos de los que Assange es sospechoso prescriben en agosto de este año.

Aunque dos instancias judiciales han rechazado la petición de los abogados de levantar la orden e interrogarlo en Londres, Apelación había criticado en su fallo a la fiscal superior, Marianne Ny, por la paralización del proceso y por no ofrecer vías alternativas.

“Creo que el fiscal general ha contactado a Marianne Ny para pedirle que la investigación se reanude. Esto supone que lo que hemos pedido durante cuatro años finalmente ocurrirá y es un triunfo para Assange”, afirmó Samuelsson.

Assange es buscado por cuatro supuestos delitos contra dos mujeres, que él niega, cuando estaba de visita en Suecia en agosto de 2010, pero no ha sido acusado formalmente con cargos.

El proceso ha estado rodeado de polémica sobre la solidez de las denuncias y los motivos de las demandantes, filtraciones a los medios, sustituciones de fiscales y una reapertura del caso que había sido reducido inicialmente a un delito menor.

Assange fue detenido en Londres en diciembre de 2010 y entonces comenzó un largo proceso judicial en el Reino Unido, que culminó cuando el Supremo británico rechazó su último recurso.

Ecuador concedió entonces asilo político al “exhacker” para evitar que fuera enviado desde Suecia a EEUU, donde podría afrontar un juicio militar por la información confidencial difundida en WikiLeaks.- (Agencias)