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México (28 de abril).-
Este próximo Día del Niño se presenta como la ocasión ideal para regalarles a los más pequeños de la casa algo que puedan aplicar en diversos ámbitos de su vida, y qué mejor que hacerlo fomentándoles una educación financiera.
De acuerdo con la revista Proteja su Dinero, editada por la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), se puede inculcar a las niñas y niños la noción del ahorro desde temprana edad.
El organismo señala que un buen inicio para adentrarse en el tema es explicar a los menores que las cosas no son gratis y que todo siempre tiene un costo, desde la comida, los juguetes, el teléfono o el Internet, los cuales se pagan con dinero que obtienen los padres al trabajar.
Agrega que algo fundamental para el crecimiento de los pequeños es hacerles comprender la diferencia entre necesidades y deseos, y hacerles ver que habrá ocasiones en que se deberá dejar de lado las cosas que nos gustan, por cosas que se necesitan.
La Condusef aconseja además crearles la conciencia de que el dinero es limitado, pues el dinero que reciben proviene de los padres, abuelos o los domingos del tío, y es posible que haya veces que no reciban más que lo que les den sus padres, por lo que son variables sus ingresos.
En este punto, elaborar un presupuesto les permitirá saber cuánto necesitan para comprar lo que quieren, y de esa forma ahorrar si es necesario.
Otra cuestión importante es aprender a comprar y hacerlo de una manera inteligente, es decir, meditar sobre la necesidad del artículo y comparar los precios de los diferentes lugares donde se puede adquirir el producto, así como la calidad del mismo.
Al desarrollar este buen hábito, los niños se convertirán en consumidores inteligentes, lo que les ayudará a controlar sus gastos y ahorrar, subraya la Condusef.
También invita a los padres a enseñar a los hijos a valorar el esfuerzo que realizan al estudiar, pues el conocimiento que adquieran será la base para que en un futuro puedan trabajar en las mejores condiciones posibles, e intercambiar ese trabajo por dinero y satisfacer sus necesidades.