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"Conocí y participé en el negocio con Cecilia Flores hace exactamente tres años, en el 2006. Mucho antes que ella se incorporara al Ayuntamiento, un día me pidió cierta cantidad de dinero para traer a un artista. Creo que fui el primero o uno de los primeros en invertir con ella, o al menos eso me hizo pensar..." comentó a Artículo 7 uno de los jóvenes inversionistas particulares que tuvo tratos comerciales con Cecilia y que prefirió mantenerse en el anonimato.
Posteriormente, a principios de este año, ya en 2009, Flores Argáez le pidió a nuestro declarante que invirtiera otra vez para traer un espectáculo "pero ya no quise aportar porque ya me había enterado que mucha gente estaba involucrada aportando para el negocio y eso me dio desconfianza: ningún negocio da para pagar tantos intereses a tanta gente". "Además", señala el declarante, "la última vez que invertí me engañó. Cuando me pidió el dinero me dijo que era para traer a un artista supuestamente para un evento del Ayuntamiento de Mérida. Por ello estaría yo seguro de la recuperación del dinero y resultó que no fue un evento del Ayuntamiento sino que fue un negocio particular organizado por ella. Qué bueno que le fue bien en aquella ocasión, si no, ya me puedo imaginar qué hubiera pasado con mi dinero".
Muchos de los eventos se llevaban a cabo supuestamente en otros estados del país. A la postre, parece que el Ayuntamiento de Mérida nunca contrató artistas a través de esa empresa, "pero para mí no cabe duda que en ocasiones ella usó al Ayuntamiento como argumento" para convencer y darle una falsa seguridad a los inversionistas "era parte del engaño" dijo nuestro informante.
¿Crees que sus jefes en el Ayuntamiento estaban enterados de lo que hacía?
—Del alcalde estoy seguro que no, porque en una ocasión (que ella sabía que yo iba a ver al alcalde en una reunión social), ella me llamó con urgencia para que no fuera yo a mencionar delante de César Bojórquez lo de su empresa de "activación" de artistas. De otros realmente no lo sé.
¿Sabes de alguna persona que haya invertido con ella?
—Que me conste, de personas que yo conozco, dos más. Una de ellas le dió el dinero desde aproximadamente octubre o noviembre del año pasado, ofreciéndole el doble de utilidades. Para enero, cuando supuestamente le iba a pagar, Cecilia le ofreció duplicárselo una vez más. Otro amigo, para principios de enero le dió $350,000 que se suponía le devolvería con utilidades para febrero. Es por este amigo que me enteré, antes de que se diera a conocer en la prensa, que Cecilia había desaparecido.
¿Cómo cuantificaba ella el porcentaje de utilidades para el inversionista?
—Realmente no había una regla. Simplemente por cada inversión ofrecía diferentes porcentajes. Al principio los porcentajes eran de 20 o 30. Pero fue ofreciendo mayores porcentajes con el tiempo, hasta de 100% o más. Supongo que, con el fin de obtener más rápido el dinero para pagar las deudas con otros inversionistas, empezó a ofrecer cada día más. Ello la llevó a enredarse aún más. Artículo 7