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Integrantes del Movimiento Ciudadano en Contra del Alza al Transporte Público iniciaron esta semana una movilización por distintos puntos de Mérida con el propósito de recabar más de 30 mil firmas y presentárselas al gobierno del Estado, como una muestra del rechazo generalizado a esa medida.
Las firmas serán recabadas en módulos instalados en la Plaza Grande y otros parques de la ciudad, como el Eulogio Rosado y facultades de universidades públicas y privadas, a partir del miércoles 23 y hasta el miércoles 30 de este mes, desde las 10 de la mañana.
Indicaron que los permisionarios del transporte siempre se escudan en el costo del combustible y de las refacciones para pedir aumentos a sus tarifas, pero no se comprometen —y si lo hacen no cumplen— a mejorar el servicio a los usuarios, sobre todo a las personas discapacitadas y a adultos mayores, a quienes no les dan parada; así como a los estudiantes a quienes muchas veces les rechazan sus credenciales de descuento.
En rueda de prensa que ofrecieron en días pasados en el Pasaje Picheta, los integrantes de dicho movimiento, entre los que se encontraban Rafael Gamboa Moguel (vocal); Jorge Ortiz Palma (representante de Yucatán Igual A.C.), Javier Sauri Ribbón y Alejandro González Giovannetti (presidente y secretario general de Jóvenes Proactivos de Yucatán A.C., respectivamente), así como Nino Vitorio Ferro Muñoz y Yesenia Polanco Ross, secretarios de Asuntos Juveniles del PRD y PAN, respectivamente; se sumaron a las voces que también han manifestado su inconformidad contra el alza en el transporte público.
La agrupación planteó las siguientes exigencias: No al alza del transporte público y sí a una disminución de la tarifa; servicio eficiente y de buena calidad; un trato no discriminatorio y/o excluyente para estudiantes, discapacitados y personas de la tercera edad; que al menos dos unidades de cada ruta tengan rampa para discapacitados.
Otras peticiones son: mejores condiciones salariales y laborales para choferes, con el fin de evitar que adopten actitudes indebidas, tales como no entregar boletos a los usuarios, para resarcir sus bajos niveles de ingreso; modernización total de las unidades; que se retiren las concesiones a los permisionarios que no cumplan los acuerdos y que se respeten las credenciales de descuento.
La representante del PAN calificó el alza al transporte como un auténtico madruguete a la "ciudadanía", a la que nunca se le informó ni avisó de lo que venía.
Incluso, aseguró que se trata de un "pago de favores" del gobierno del Estado a los concesionarios del servicio de transporte, pese al Pacto Económico por Yucatán que el Ejecutivo estatal firmó meses atrás y en el que se comprometió, entre otras cosas, a evitar alzas durante todo el 2009.
Sauri Ribbón secundó a Yesenia Polanco y comentó que el alza al transporte es un pago de favores a los concesionarios del transporte y que el gobierno del Estado lo autorizó ahora para dar tiempo a que la gente se olvide y en las próximas eleccions no se mencione el tema.
Sin embargo, mencionó que, al margen de los partidos políticos, la gente debe exigir lo que se merece, que en este caso sería un servicio eficiente y un trato digno y justo por el que están pagando.
Por cierto, se aclaró que también fueron invitados el PRI y el Partido Verde Ecologista, pero el primero no aceptó y el otro dijo que sí, pero no acudió a la cita.