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Morelia (17 de julio).- Tras la detención de Rosa Verduzco, mejor conocida como “Mamá Rosa”, encargada del albergue “La Gran Familia”, en Zamora, Michoacán, el historiador, Jean Meyer, niega que en las instalaciones se viva bajo situaciones insalubres, tal como lo sostienen las autoridades.
Meyer, quien es historiador del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE), dijo que conoció a Rosa Verduzco en 1979, gracias al historiador Luis González. Asimismo, aseguró conocer el albergue.
En entrevista con Denise Maerker, el historiador comentó que su hijo Matías, director de cine, quería hacer un documental, ante lo cual, Rosa Verduzco, condicionó la realización de dicho proyecto siempre y cuando estuviera viviendo tres años en “La Gran Familia”.
Cuestionado sobre las condiciones en las que viven las personas en el albergue, Jean, quien estuvo por última vez en mayo de este año en su interior, sostuvo que “no es una casa de lujo. Las condiciones son muy espartanas”, señalando que hay hacinamiento por el hecho de que ahí viven más de 600 personas.
Incluso, destacó, durante la pasada administración federal, entregaron recursos a “Mamá Rosa” para remodelar la cocina y el comedor, además, de que otros estados solicitaban que los internos de reformatorios fueran aceptados en el albergue.
Sobre las declaraciones de las autoridades, en el sentido de que la comida que se daba a quienes vivían en “La Gran Familia”, estuviera en malas condiciones, el historiador negó tal situación, arguyendo que ’ Mamá Rosa’ “tiene el apoyo de todo el Valle de Zamora, los productores le entregan, todos los días, cantidades tan grandes de comida que no sabe qué hacer con ella”.
Añadió que los excedentes son repartidos en las comunidades cercanas a Zamora.
Asimismo, se dijo impresionado por el operativo que se implementó para la detención de Verduzco. “A ‘La Tuta’ no la agarran, y sí van con todo contra esta persona”, apuntó.
También negó que los niños del albergue fueran obligados a pedir limosna, aclarando que se trata de una colecta anual, “y ella, en su camioneta, en el altavoz da los nombres de las personas que no dan o que dan poquito. Entonces, en ese sentido, sí tiene enemigos”.
Jean Meyer invitó a revisar el trabajo del Premio Nobel de Literatura 2008, Jean-Marie Le Clézio, quien publicó un texto sobre la labor de “Mamá Rosa”, donde cuenta que, cuando tuvo edad para buscar novio, prefirió buscar niños sin hogar, a quienes les dio educación –desde primaria hasta universidad-.
Del mismo modo, el historiador se dijo extrañado por el hecho de la difusión que se ha dado el caso, conocido hasta China-, mientras que cuando hace unos años, se dio la desaparición de 300 personas en un pueblo de Coahuila, “ningún procurador general de la República se preocupó”.
Agregó que la situación en Michoacán no ha mejorado, sigue la violencia y los secuestros. “Después de algunos éxitos iniciales están dando palos de ciego y la situación no mejora”, aunque reconoció algunos logros cuando comenzó el operativo de seguridad en territorio purépecha.
Finalmente, Meyer recordó que desde los años 80, los secuestros ya tenían fuerte presencia en Michoacán, incluso se pidió apoyo al Presidente Carlos Salinas. Destacando que “Mamá Rosa”, en algunos casos, sirvió como mediadora en algunos casos, incluso llevando medicamento a los secuestradores o “la maleta de dinero a los criminales”.- (Notimex)