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México (23 de diciembre).-
Con un collarín y tras un par de horas, André-Pierre Gignac abandonó el hospital por su propio pie tras abordar la camioneta que lo trasladó al hotel de concentración del equipo.
El delantero salió por la puerta de urgencias a la 1:10 de la madrugada después de que había ingresado alrededor de las 23:00 horas por una lesión ocurrida durante el partido de la final entre América y Tigres.
El equipo felino informó que, tras realizarle los estudios correspondientes, se determinó que el delantero francés padece un esguince grado 2 a la altura de las cervicales y por ahora es duda para el juego de vuelta el domingo en el Estadio Universitario.
Gignac se lesionó al minuto 71 del juego en el Estadio Azteca cuando chocó con el defensa Bruno Valdez. La acción mandó al piso al jugador de Tigres, que debió esperar algunos minutos para recibir atención médica y ser sacado del campo de juego en camilla.
De acuerdo con especialistas consultados por Mediotiempo, por tratarse de un esquince de grado dos además de la contractura muscular, el collarín limitaría la movilidad para corregir la postura de la columna y esto toma tiempo, por lo que sería difícil que juegue en Navidad.